Leire Pajín no es Guerra

La juventud por la juventud no es un valor en política. No se sabe qué méritos adornaban a Leire Pajín para asumir el control del aparato socialista. El tiempo ha demostrado que su juventud y la osadía dialéctica no eran suficientes para ser la secretaria de Organización del PSOE. Es posible que lo pudiera hacer bien como responsable de alguna agrupación local o asumir algún área menor de la ejecutiva federal, pero está a años luz de Guerra. Es un error muy grave que la lealtad personal sea el principal mérito, por no decir el único, a la hora de asumir responsabilidades. La consecuencia es que el Gobierno está lleno de ministros tan ausentes como ineficaces y el PSOE se ha convertido en una olla de grillos. En la época de Guerra, quien se movía de la foto no salía mientras que ahora el poder de Pajín es residual. Los mismos que criticaban al PP antes del congreso de Valencia o defendían las primarias demuestran ahora su incoherencia. Y Pajín se ha convertido en un problema grave para el PSOE.