Miguel Ángel

Matrimonios gais piden al TC que acabe con su incertidumbre e inseguridad

El colectivo de gais y lesbianas ha pedido hoy al Tribunal Constitucional que decida ya sobre el recurso de inconstitucionalidad que pesa sobre la Ley del matrimonio homosexual y ponga fin a seis años de "gran incertidumbre e inseguridad"para miles de parejas y sus hijos.

Así reza la carta dirigida al presidente del alto tribunal, Pacual Sala, que esta mañana ha entregado en la sede del TC el presidente de la Federación Estatal de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales (FELGTB), Antonio Poveda.

"Con esta ley no sólo nos dieron los derechos, nos dieron la dignidad y ahora no pueden quitárnosla", ha declarado Poveda, que estaba acompañado por su marido, Miguel Ángel, y sus padres, "que quieren que tengamos los mismos derechos que sus otros hijos con matrimonios heterosexuales".

Poveda y el resto del colectivo está "esperando que Rajoy retire el recurso de inconstitucionalidad y de verdad gobierne para todos"ya que la ley que permite el matrimonio entre personas del mismo sexo "no ha perjudicado a nadie, ni ha supuesto el fin de los modelos tradicionales de convivencia".

A la cita ante el Constitucional también han acudido Patricia y Pili, una pareja que lleva cuatro años casada y tiene una hija de meses y que sólo pretende "vivir en un país tolerante en el que quepamos todos, porque la diferencia existe, pero es buena", ha explicado la primera.

También estaba la primera pareja de hombres que se casó tras la aprobación de la ley, el español Emilio Menéndez y el estadounidense Carlos Baturín.

"Llevamos 36 años juntos; 30 de discriminación y desamparo, y ahora 6 de incertidumbre", ha detallado Menéndez, antes de subrayar que la ley de 2005 "no nos ha concedido ninguna ventaja, sólo a puesto fin a todas nuestras desventajas".

Así, ha explicado que con esta ley, las parejas de homosexuales "tienen derecho a dejarse una herencia, a tener hijos, a ser tutor legal si al otro le pasa algo, a poder opinar si el otro sufre un accidente".

Una situación parecida fue la que convenció a Poveda de la necesidad de luchar por los derechos de los homosexuales.

Allá por los años 80, en plena crisis del sida, "un amigo nuestro no pudo acompañar a su pareja en los días antes de su muerte porque la familia lo impidió, y eso nos dio muchísima rabia", ha recordado.

Poveda ha planteado el "absurdo legal"que supondría declarar la ley inconstitucional: "¿los hijos serían ilegales? ¿habría que devolver las herencias?".

Esa es la duda de Paloma Calle, una mujer de 36 años, que acaba de cumplir un año de casada con Celeste, y dará a luz a su primer hijo en unos días.

Calle detalla que ella es sólo madre gestante, porque el bebé está concebido con un óvulo de su pareja.

"Nos hemos casado para que nuestro bebé esté en una situación de igualdad de derechos, y si ahora invalidad la ley ¿de quién será este bebé? ¿quién podrá inscribirlo en el registro?", se pregunta.

"Es una locura. No creo que pase. Creo en la sensatez del Tribunal Constitucional", concluye con firmeza.