El TSJC alerta de que los recortes de personal agravarán el colapso judicial

BARCELONA- La situación de colapso que sufre la justicia catalana y más concretamente algunos juzgados es crónica, viene de muy lejos, pero ahora puede agravarse por culpa de los temidos recortes de la Generalitat. En el ámbito judicial significarían una disminución del personal, lo que afectaría a un sector sobrecargado de trabajo.
El principal problema reside ahora en los juzgados de El Vendrell, Reus, Blanes y Figueres. El primero tiene unos 2.000 casos pendientes, y el resto no le va a la zaga.Basta recordar que el límite impuesto por el Consejo General del Poder Judicial es de 350 casos sin resolver para darse cuenta de la gravedad de la situación. Además, en El Vendrell y Figueres faltan jueces titulares.
Fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) explican a LA RAZÓN que «son juzgados complicados, pertenecen más a o menos a zonas costeras, y ahí en verano se disparan las causas, por robos y vandalismo». Es el pez que se muerde la cola y el TSJC alerta del peligro que supondría un recorte de personal, aún no confirmado.
Situación «insostenible»
Recientemente, el presidente del TSJC, Miguel Ángel Gimeno, advirtió a la consellera de Justicia, Pilar Fernández Bozal, de la «insostenible» situación a la que podrían verse abocados algunos juzgados catalanes, debido a las numerosas vacantes de funcionarios y la falta de nuevos nombramientos de interinos y sustitutos.
La consellera le hizo caso y adoptó medidas, entre ellas suplir más bajas de personal, y no sólo por muerte o traslado, sino de todo tipo. Además, la pasada semana Gimeno presidió la toma de posesión de 31 nuevos jueces. El presidente del TSJC admitió que «la situación ha mejorado un poco».
Sin embargo, los citados juzgados siguen colapsados, año tras año, y con escasas posibilidades de mejora. Una posible solución sería la creación de la Oficina Judicial. Tiene que implantarse en todas las comunidades autónomas, aún sin una fecha concreta. Significará una reorganización del trabajo dentro del sistema judicial, con menos separación entre juzgados y la optimización de la labor de los funcionarios. Gimeno reclamó a la conselleria que «refuerce de manera permanente su compromiso con el desarrollo de la futura Oficina Judicial».