Estados Unidos

El Curiosity fotografía el cauce de un río en Marte

Aunque ya se había probado la presencia de agua, es la primera vez que se encuentran rocas moldeadas por ella

El tamaño y la forma de las rocas fotografiadas permite conocer la velocidad de la corriente
El tamaño y la forma de las rocas fotografiadas permite conocer la velocidad de la corrientelarazon

Madrid–El robot Curiosity de la NASA, que se encuentra de misión recorriendo la superficie de Marte, ha hallado pruebas de que un arroyo de agua corrió alguna vez «vigorosamente» por el planeta rojo, según avanzó ayer la agencia espacial norteamericana en un comunicado. Aunque ya se había comprobado con anterioridad la presencia de agua en la superficie marciana, es la primera vez que se encuentran rocas moldeadas por la acción del agua.

Ahora, la labor de los científicos se centra en analizar las imágenes enviadas por el Curiosity. Observando la forma y el tamaño de las rocas podrán determinar la velocidad a la que fluía el agua, así como la distancia de los cursos fluviales. «Gracias al tamaño de los sedimentos que arrastraba el agua podemos interpretar que la corriente avanzaba a una velocidad de unos tres pies por segundo –0,9 metros–, con una profundidad estimada que llegaría a una altura entre el tobillo y la cadera», afirmó William Dietrich, uno de los responsables de la misión e investigador de la Universidad de Berkeley, en California. «Se ha especulado y se ha escrito mucho acerca de la existencia pasada de flujos de agua en Marte. Pero esta es la primera ocasión en la que vemos rocas transportadas por el agua en el planeta», dijo Dietrich.

El lugar del hallazgo se encuentra localizado entre el borde norte del cráter Gale y la base del monte Sharp, una elevación dentro del propio cráter. «La forma de las piedras nos dice que fueron transportadas, y su tamaño revela que este movimiento no pudo ser a causa de la acción del viento», explica Rebecca Williams, del Instituto de Ciencias Planetarias de Tucson, Arizona. Ahora, los investigadores esperan poder emplear el Curiosity para conocer la composición de estas rocas y del posible ambiente húmedo en el que se formaron.

«Queremos humanos en el planeta rojo»
«¡Adelante, Curiosity!». Con este grito de ánimo finalizó ayer Charles Bolden su discurso en el Centro para el Desarrollo Tecnológico Mundial en Madrid. En su fugaz visita a España, el administrador de la NASA participó en un coloquio sobre la colaboración entre Estados Unidos y nuestro país en la misión gracias a la cual «hemos conseguido poner un coche en suelo marciano», bromeó Bolden. «Todos estos datos están encaminados a que en futuro llevemos a humanos a Marte. Y, tal vez podría ser español», sugirió.