Palencia

Marta tampoco dopa

Mercedes Pérez Barrios, magistrada-juez del Juzgado de Instrucción número 24 de Madrid, «acuerda el sobreseimiento provisional y archivo de las presentes actuaciones para Manuel Corral (fisioterapeuta) y Marta Domínguez Azpeleta por lo que se refiere al delito de Dopaje Deportivo contenido en la presente resolución», en Madrid a 4 de julio de 2011.

Marta Domínguez empieza a ver el final del túnel
Marta Domínguez empieza a ver el final del túnellarazon

¿Significa esto que Marta ya puede mirar de frente a los Juegos Olímpicos de Londres en 2012? Casi; pero no sería descabellado que, una vez que se recuperara del parto de Javier, su primer hijo a quien dio a luz en mayo, empezara a preparar la cita olímpica.
A Marta la interrogaron en Palencia el 9 de diciembre, día en que comenzó su peor pesadilla, y sólo dos semanas después la «operación Galgo», tras prestar la atleta declaración el día 22 en el juzgado, mostraba indicios de estar cogida con alfileres. El 28 de enero Mercedes Pérez Barrios la desvinculó de «la red de dopaje y suministro», al probarse que no tenía relación ni con el entrenador Manuel Pascua ni con el médico Eufemiano Fuentes. «Desde el inicio cabía apreciar la falta de relación entre sí de los autores de alguna de las conductas investigadas» por la UCO, infirió la magistrada. Ya entonces se supo que el tratamiento de iontoforesis con el que ayudó a Eduardo Polo, su «liebre» en los entrenamientos, estaba permitido desde el 25 de diciembre de 2009.
Probado que Marta no era el «galgo», la siguiente aportación hacia su inocencia fue que la Agencia Estatal del Medicamento y Productos Sanitarios y el laboratorio del Consejo Superior de Deportes analizaron el famoso «oro», que resultó que no era «ni trembolona, ni testosterona ni cualquiera de sus derivados». La jueza archivó el «caso oro» y Marta Domínguez dejó de ser una «camella». El 12 de mayo se dio un paso más hacia su liberación, al anular la jueza las escuchas telefónicas de la deportista.
Quedaban pendientes dos acusaciones, el tratamiento de iontoforesis y «los indicios de la existencia del delito contra la Hacienda Pública». Ayer, el primero fue sobreseído al no «existir indicios racionales de criminalidad en la conducta de Marta Domínguez Azpeleta y Manuel Corral»; así, «de conformidad con lo dispuesto en el Art. 641.1 de la LEcr procede decretar el sobreseimiento provisional y archivo de las presentes actuaciones por lo que se refiere al Delito de Dopaje Deportivo».
Queda por aclarar lo del «blanqueo de dinero». Un perito judicial hará un informe y antes de que termine julio la jueza tomará una decisión sobre el asunto. Marta tenía abiertas sendas cuentas en Andorra, con 45.000 euros, sin movimientos desde 2008, y en Mónaco, con 37.000 euros, sin movimientos desde 2006 y con unos intereses anuales de 200 euros. Su defensa alega que «no hay delito fiscal» al no haber llegado a los 250.000 euros anuales de ingresos; se considera fraude a partir de 120.000 «y tampoco ha sido el caso». No obstante, hace meses que la campeona del mundo de los 3.000 cumplió con Hacienda al devolver 80.000 euros.
Ahora Marta mira a los JJ OO de Londres 2012. Llegará si la jueza convence al CSD de que no se ha dopado y a la fiscal de que Marta está en las antípodas de la «operación Galgo».