Demoledor Nadal

Madrid- El circo de Monfils no alteró el camino de Nadal en la Caja Mágica. Rafa ya está en semifinales e intimidando, con un tenis que recuerda al que mostró en Montecarlo hace tres semanas. «Lo estoy haciendo muy bien», afirmó. Y tanto. El francés no fue rival, todo lo contrario de lo que le espera hoy, Nicolás Almagro. Una prueba más de que España es la primera potencia mundial sobre tierra batida. «Nico» tampoco ha cedido un set en todo el torneo y es bastante mejor jugador que el que ha perdido en las cinco ocasiones en que ya se ha medido con Nadal.Rafa tenía enfrente un jugador de su promoción. Monfils es tres meses mayor que él, pero su juego no tiene nada que ver. La seriedad y la concentración de Nadal contrastan con la ligereza con la que se toma los partidos el francés. Sus andares de rapero, los diálogos con su palco y consigo mismo, los gestos hacia la grada... Tiene cierta tendencia a la autodestrucción. Entiende que el juego es un «show», pero ante Nadal eso no vale. «Cuando está centrado es peligroso», avisó el de Manacor. Y el galo no estuvo centrado. Que si un dolor en el abdominal, que si su servicio no funcionaba, que si la recogepelotas no le enviaba una bola a tiempo; tiró el partido con una doble falta... Regaló alguna derecha explosiva, pero el resto fue un mónologo de Nadal. Aprovechó sus oportunidades de «break» en el primer set; salvó las únicas dos bolas de ruptura que tuvo en contra siendo muy agresi- vo; controló los intercambios, y se puso a pensar en Almagro.«Está jugando mejor que la última vez que nos enfrentamos –en París-Bercy ‘‘Nico'' tuvo cinco bolas de partido–, pero aquí las condiciones son muy distintas. El hecho de que sea en altitud y la bola sea más rápida pueden favorecerle a él un puntito, pero yo tengo otras cosas», dijo Nadal.Almagro afronta hoy su primera semifinal de un Masters 1.000. Es la mejor semana de su vida y todo eso sin haber probado el sabor de la central. Ha liquidado a Mónaco, Melzer y Soderling con un gran saque y un revés que se convierte en una segunda derecha. «Mis armas están ahí, las he limpiado el polvo, las he desenfundado...» y ahora le espera Nadal.- Desfile de vips. El fin de sema- na es el momento de la invasión de las caras conocidas en la Caja Mágica. Al clásico cupo de madridistas (Raúl, Arbeloa, Xabi, Albiol, Higuaín, Casillas, Sergio Ramos, Pellegrini, Florentino Pérez y Jorge Valdano) se sumaron el atlético Reyes; el jugador de los Blazers Rudy Fernández; Mariano Rajoy y la Infanta Elena.

Un psicólogo, josé Perlas y el lagoNo hizo falta que Nadal empezara su partido para dar por hecho que iba a ser el rival de Almagro. Hasta él lo tenía asumido. «Si gano, me tiró al lago», comentó entre bromas. «Nico» vive su mejor momento en el circuito. La fama de su mala cabeza ha quedado atrás porque en los últimos diez meses ha cambiado radicalmente su sistema de trabajo. «Ahora soy más profesional de lo que era antes», dice. Abandonó Murcia, se fue a Barcelona con su novia, se puso en manos de José Perlas y su transformación ha sido radical. Trabajó con un psicólogo para controlar sus reacciones en la pista; contrató a un nutricionista y ha perdido cinco kilos... Ahora se trata, como él asegura, de «seguir disfrutando». «Rafa está por encima de los demás en tierra batida, pero tengo armas para combatirle», comenta. El lago y su primera final en un Masters 1.000 le esperan.