Más milagros por Reyes Monforte

Espero que sea la noticia del verano, ya que del año nos lo están poniendo bastante difícil. Pero hasta en circunstancias adversas hay lugar para el milagro, quizá incluso más. El ejemplo de lo que les hablo es Vanesa Pastor. Imagino el día que le diagnosticaron el cáncer de ovarios y cómo el mundo, su vida y sus sueños se le vinieron encima. Si en ese momento alguien le hubiese asegurado que 3 años más tarde se convertiría en la feliz y orgullosa madre de Mario, no se lo hubiera creído bajo ningún concepto.

Cuenta su médico que Vanesa lloró más porque la vida le negaba la posibilidad de ser madre que por el cáncer que padecía. A saber lo que realmente se barruntaba en su desconcertada cabeza. En estos casos, el coraje del paciente y el trabajo milagroso y nunca suficientemente reconocido de los médicos especialistas obran el milagro. El milagro se llama Mario, aunque podría llamarse Vanesa, o como los miembros del equipo médico que han hecho posible que hablemos de un hito en la reproducción asistida española. Lo mejor es que Mario no estará solo ni será el único. Hace un par de años, en Valencia, nacieron dos gemelos de una madre con cáncer de mama gracias a una doble congelación de tejido ovárico y ovocitos. Y esperemos que vengan muchos más. Querrá decir muchas cosas, como que el cáncer no tiene por qué estar reñido con la maternidad ni con la vida. Gracias y a por más milagros, a ser posible, sin que nadie recorte sueños y esperanzas.