Cerco a la corrupción
Un nuevo balneario y empresas tecnológicas para la futura Valencia
La alcaldesa asegura que, tras la venta de Villa, existen entidades que ayudarían a reanudar las obras del nuevo Mestalla.
Innovación, sostenibilidad y turismo de calidad son los tres pilares sobre los que Valencia pretende apoyarse en los próximos años. La alcaldesa Rita Barberá dejó ayer en un segundo plano las otrora aspiraciones de convertirse en capital mundial de los eventos deportivos. Conseguida «la mejor Copa América de la historia» -la 32- y la más inusual -la 33-, a la primera edil no le vale cualquier cosa. «O tengo lo mejor, o no lo quiero», declaró ayer en lo que se interpretó como una renuncia a acoger una prerregata de la próxima edición de la famosa regata. Turismo termalLa ambición mira ahora hacia otros objetivos, entre los que destaca, además del desembarco de Appel en pleno centro, una «apuesta empresarial importante» en torno al «emergente turismo termal». Una iniciativa que, según dijo, no tirará de fondos públicos. Y es que la economía, y en particular la crisis, centraron buena parte del discurso de Barberá en el Foro de Las Provincias, donde lamentó las dificultades que está teniendo el PAI (Programa de Actuación Integrada) del Grao para llevarse a cabo. «Está sufriendo problemas de financiación porque no hay dinero. Bueno, sí lo hay, pero el dinero es miedoso».Buenas noticias sin embargo para el plan del nuevo Mestalla. Según avanzó la primera edil, podría existir un inversor que contribuyera a la finalización del nuevo estadio del Valencia Club de Fútbol. «Me llegan algunas ondas de que después de la venta de Villa, podría haber alguna entidad capaz de poner sobre la mesa los millones que permitan la continuidad de la terminación del estadio».
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