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Chavela más grande

Cuándo: día 10 de julioDónde: Residencia de Estudiantes de MadridCuánto: 20 euros 

Chavela más grande
Chavela más grandelarazon

La poesía de Lorca y la voz de Chavela Vargas, musa de poncho rojo y de biografía intensa en los escenarios y, sobre todo, fuera de ellos. La cantante ha publicado un disco/homenaje, «La luna grande», dedicado al poeta, que siempre ha sido un amigo constante que la ha consolado de los dolores, y ella sabe bien que ha padecido unos cuantos. Un pretexto que la ha traído, después de una prolongada ausencia, a la Residencia de Estudiantes. «Siete años se fueron, pero aquí estoy, con esos siete años de más, venid a verlos», proclamó riendo. Llevaba una corbata ancha roja de lunares blancos, traje negro y unas gafas oscuras que recordaban las de Ray Charles. «Aquí encontré la paz, la ternura, a pesar de que me peleaba con todo el mundo», reconoció. Presenta álbum, pero también libro, «Dos vidas necesito: las verdades de Chavela» (Editorial Montesinos), escrito con la periodista María Cortina. Una larga conversación donde narra la crónica de sus experiencias salvajes en amistades y tequila, y donde cada hecho sólo es una versión de todas las existentes.

Una noche de nostalgia
El segundo proyecto es un documental titulado «El ruiseñor y la noche», dirigido por Rubén Rojo, que da cuenta del vínculo estrecho que unía al escritor granadino y a la cantante. Unos proyectos que cuajan todos en una cita muy especial: la del próximo día 10 de julio. Esa noche, Chavela Vargas cantará en Madrid los temas de este disco acompañada de sus amigos Martirio, Raúl Rodríguez y Miguel Poveda. «Con Federico tuve un acercamiento cuando me hospedé aquí. Era una noche de nostalgia en la que pude recordar lo que había perdido. Para mí, él es algo lleno de ternura y cosas bellas». Chavela Vargas habla intercalando ironía y puntos de humor con divagaciones poéticas, donde las metáforas y las ideas van confundiéndose en una malla de palabras. Una evasión o una manera de hablar de la realidad, que tantas cosas buenas le ha regalado y tantos tragos amargos le ha dejado también. «No me duele nada –afirma cuando evoca el pasado–. He vivido muy tranquila conmiga misma y con mis sentimientos. Solamente he tenido una mañana de gran sorpresa. Cuando un día, al levantarme, descubrí que no podía caminar. Ahí pagué todas mis culpas». Venía nerviosa de un viaje largo. Pero se fue creciendo en el auditorio, como las damas acostumbradas al aplauso y al público. «Actuar siempre es emocionante», asegura ella, que jamás ha permitido que ninguna amargura mellara su sonrisa. «He tenido la fortuna de amar las cosas que querido y tenido que hacer. Las he hecho siempre con todo mi amor. La grandeza siempre está en las cosas simples, en las cosas bellas». Por eso, quizá, entonó una alabanza: «Bienvenidos los poetas y los cantantes. Ellos se preguntan que sucedió con la luna de anoche. Nosotros les damos fuerza a sus versos y los silencios de las canciones». El foro la recibió con un aplauso. Reía sus ironías. «¿Qué le debe a Lorca?», le preguntan; «¿Qué me debe él a mí?», responde ella. Sus 93 años no le han restado vitalidad ni ganas de acometer nuevos proyectos: «Me sigue apasionado todo, los escritores, el cielo, las ciudades...». Y deja una nota de humor lanzada a los periodistas: «Ustedes inventen lo que quieran». Pero en su conversación, la alegría se mezcla con la tristeza, y no dejó de aludir al lugar donde esperará, al mar. «Se fue la vida, aunque me encanta estar aquí», comentó sin que se supiera bien si este aquí se refería a Madrid o a otra cosa. «No sé a dónde iré ahora. De momento, a dar una vuelta por la Residencia y jugar con los gatos negros».

 

Más que música y poesía
El disco «La luna grande» es una selección de poemas de Federico García Lorca (en la imagen) que canta/recita Chavela Vargas. Lo hace con todo el dolor de su alma, que es lo que da forma y eco a su voz. Son versos escogidos de todos los libros del escritor. «Le debo la vida», comentó Chavela Vargas al referirse a él. Laura García Lorca reconoció ayer que se había apropiado de los textos y los había hecho suyos a través de este álbum.