Duran critica los límites al gasto que impone el Gobierno

BARCELONA- Obsesionado por tranquilizar a los mercados y por cumplir con las órdenes de la Unión Europea, el Gobierno lleva varios meses dando pasos en la línea de limitar el gasto público para controlar el déficit. La última iniciativa en este sentido del Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero es poner techo al gasto local y autonómico, algo que ayer criticó el secretario general de CiU, Josep Antoni Duran Lleida, en la escuela de verano de Unió celebrada en S'Agaró.
Duran censuró que el Gobierno quiera maniatar a los ayuntamientos sin conceder a cambio «una inyección de ingresos adicionales, ya que hay muchos municipios que atraviesan una verdadera «situación de angustia» por la falta de recursos.
La medida del Gobierno, aprobada en el último Consejo de Ministros, se basa en imponer un tope máximo al incremento anual del gasto del Estado y de las principales entidades locales. Ese tope se deriva de la evolución del PIB nacional en los cinco años anteriores y de las previsiones de evolución en los tres siguientes. Exactamente lo mismo que quiere imponer a las comunidades, aunque en este caso es imposible porque son las autonomías. «Deben ser la comunidades autónomas quienes fijen el techo de gasto, que era parte del discursos del gobierno socialista desde hace cuatro años», recordó con ironía el también portavoz de CiU en el Congreso. Sobre el mundo local, Duran se mostró de acuerdo con que «los ayuntamientos tienen que gastar menos», aunque subrayó que deben tener «un aditivo de finanzas por parte de la administración local».
El papel del PSC
El dirigente nacionalista también se refirió al papel que está haciendo el PSC como partido de la oposición en Cataluña. Lamentó su actitud poco constructiva en un momento de dificultad y también criticó su escasa utilidad para defender los intereses catalanes en el Congreso.
En esta línea, Duran reclamó apoyo para CiU de cara a las próximas elecciones generales para conseguir que no haya mayorías absolutas y para favorecer la prosperidad de Cataluña. «Cuando CiU ha tenido fuerza, Cataluña ha tenido más fuerza en España», sentenció. Los nacionalistas pretenden condicionar la gobernabilidad de España a la consecución de un nuevo pacto fiscal para Cataluña en la línea del que rige en el País Vasco.