Galicia
Al lado de Mariano por Belén Bajo
No está detrás, sino junto al futuro presidente del Gobierno. Viri, Elvira Fernández Balboa, es divertida, intuitiva y la mejor consejera de su marido
Dice el refrán que detrás de un gran hombre siempre hay una gran mujer. Yo diría que al lado, no detrás, de Mariano Rajoy está Elvira Fernández Balboa. Viri, que así la llaman para diferenciarla de su madre, es una mujer sencilla, normal y discreta, que ha sabido compaginar su profesión, economista en una multinacional, con las facetas de madre y esposa.
Es la mayor de tres hermanos, Elvira, Ana y Manuel. Sabe muy bien lo que es el esfuerzo y el trabajo porque es hija de un emigrante que estuvo tres años en Venezuela y que cuando regresó a Galicia montó una empresa de materiales de construcción y saneamiento con sus hermanos. No hay día que no recuerde a su padre, fallecido en el año 2002 y con el que mantenía una relación muy estrecha porque, según sus propias palabras, «tengo sus mismos defectos y sus mismas virtudes».
Se preocupa y se ocupa de su familia, especialmente del padre de Mariano, por el que siente una gran adoración: «Es el mejor suegro que podía tener».
El entorno y las amistades dicen mucho de una persona. Viri es como su marido. Los dos mantienen las amistades de siempre y es muy frecuente verles en los actos más importantes que Mariano Rajoy ha protagonizado como dirigente político: el Congreso de Valencia, las Convenciones del PP, los cierres de campaña y las noches electorales. Las amigas de siempre de Viri son Miriam Bellido, Mar Novás y Beatriz Portela.
Es simpática, animada y divertida –le gusta bailar–. Tiene mucha ironía y sentido del humor. Es muy celosa de su intimidad y echa de menos no poder hacer cosas tan sencillas como tomar el aperitivo o ir al cine con su marido.
Es práctica, realista y muy intuitiva, cualidades que la convierten en la mejor consejera de Mariano. Le gusta estar informada y se entiende bien con las nuevas tecnologías. Disfruta con una buena película y un buen libro. Y por encima de todo está orgullosa de sus dos hijos, Mariano y Juan.
Derrocha naturalidad, valentía y dulzura. Hay tres momentos que han quedado en la retina de todos: el abrazo con su marido en el balcón en las pasadas elecciones del 2008, la visita a un centro de discapacitados en Logroño y el beso tras ganar las elecciones. Tres instantáneas que han sido portada de todos los medios de comunicación por la expresión de ternura que reflejaba el rostro de Viri.
En estos quince años de matrimonio, más los cinco años de noviazgo, su relación se ha consolidado como los buenos vinos. «Me he casado para toda la vida», dijo Rajoy a los pocos días de contraer nupcias con Viri. La complicidad que genera vivir momentos muy intensos, especialmente lo más difíciles y complicados, ha hecho que tengan un nivel de compenetración tan alto que sus más allegados dicen que están muy enamorados.
Es inteligente y sabe distinguir lo importante de lo accesorio y como dice un matrimonio amigo de la pareja, Ernesto Muntaner y Sol Ariza, sabe hacer fácil lo difícil y sencillo lo complejo.
No le gusta el protagonismo pero es perfectamente consciente de la nueva etapa que comienza. Y no le será difícil afrontarla porque ha sabido estar siempre al lado de Mariano Rajoy.
Jugará el papel que crea necesario, marcará un estilo propio, el suyo. Tiene carácter, personalidad y valentía para hacerlo.
✕
Accede a tu cuenta para comentar