Barcelona

Mas vota sí a la independencia

El president registró su voto el jueves, el mismo día que Pujol. Evitó que las cámaras pudieran captar la imagen de cuando entregó la papeleta

Artur Mas, presidente de la Generalitat, ayer, durante el homenaje al tenor Jaume Aragal
Artur Mas, presidente de la Generalitat, ayer, durante el homenaje al tenor Jaume Aragallarazon

Barcelona- Artur Mas ya tiene otro hueco en la historia. Es el primer presidente de la Generalitat desde la restauración de la democracia que aboga de forma significativa por la independencia de Cataluña. Mas acudió anteayer a la sede de Òmnium Cultural para registrar su voto por anticipado en la consulta soberanista que se celebrará en Barcelona el próximo 10 de abril. Lo hizo sin avisar a los medios de comunicación para que no quedara constancia gráfica de su votación y, así, neutralizar parte de las críticas que recibirá por no actuar como presidente de todos los catalanes.
Mas había dado las pistas necesarias para deducir que iba a respaldar la consulta soberanista, aunque también había confesado que sentía un «dilema» porque es muy consciente de que hay una amplia parte –si no una mayoría– de los ciudadanos de Cataluña que no quieren separarse del resto de España. El presidente ha resuelto el dilema votando a favor de la independencia, pero haciéndolo sin los flashes de las cámaras fotográficas.
El independentismo de CDC
Se da la circunstancia de que Mas votó en la consulta soberanista el mismo día que lo hizo el ex presidente de la Generalitat Jordi Pujol, quien también evitó que se inmortalizara su imagen apoyando la independencia, a pesar de su haber hecho pública su mutación soberanista. Hay que recordar que el candidato de CiU a la Alcaldía de Barcelona, Xavier Trias, también piensa respaldar este proceso. Por tanto, se puede concluir que todos los dirigentes destacados de Convergència comulgan con el secesionismo.
Muy distinta fue la postura del líder de Unió Democràtica y portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Duran Lleida, que dedicó la carta web que dirige cada viernes a su militancia a desmarcarse de las tesis independentistas de sus socios de CDC.
Duran quiso mantenerse fiel a sus principios y prometió que no se dejará «arrastrar por la corriente» independentista que hay en la política catalana, porque este sentimiento que «impera» puede «provocar división y frustración por su inviabilidad».
El líder socialcristiano insistió en que Unió Democràtica apuesta desde su fundación por una España confederal e ironizó con los problemas que Pujol observa sobre el proceso independentista, la cohesión interna y la viabilidad. «¡Vaya!», se exclamó. Pese a todo, se mostró contrario a prolongar la polémica discusión con sus socios de CDC.
Las críticas de la oposición
En cambio, los principales partidos de la oposición reaccionaron de forma crítica una vez trascendió el voto de Mas. El portavoz parlamentario del PP, Enric Millo, acusó al presidente de la Generalitat de «promover una actitud de confrontación» con el resto de España y le reclamó que no actúe únicamente como el presidente de «los que se quieren separar». En opinión de Millo, la deriva soberanista de CDC sitúa a la Generalitat en «una línea equivocada y errática».
El PSC, por su parte, incidió en la incoherencia de Mas porque en el Parlament vota de forma en distinta. Los socialistas se refirieron a que CiU no respaldará la declaración de independencia que impulsa Solidaritat.