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Ford ratifica su apuesta por la planta de España

Su presidente, Alan Mulally, no contempla cerrar plantas. Ajustará la producción a la demanda real

Mulally desarrolló su presentación junto al nuevo Kuga, vehículo en el que el constructor tiene depositadas muchas esperanzas para el futuro
Mulally desarrolló su presentación junto al nuevo Kuga, vehículo en el que el constructor tiene depositadas muchas esperanzas para el futurolarazon

VALENCIA- El presidente ejecutivo de Ford, Alan Mulally, reconoció ayer en Valencia que los 18 millones de coches que se fabrican anualmente en Europa «no se corresponden con la demanda real», y que la situación actual «no es cíclica, sino estructural». Además, considera que el exceso de capacidad del sector del automóvil «te puede llevar a una conducta destructiva», por lo que se mostró favorable a reducir la producción, algo que, dijo, ya está haciendo Ford.

Mulally explicó que «estamos trabajando con todos nuestros accionistas sobre cómo ser rentables y creemos que hemos de adaptar la producción a la demanda y así mantener el valor del vehículo.

Futuro de las plantas
Sobre el posible cierre de factorías, el jefe de Ford dijo que «vamos a tratar de trabajar mucho para que todas nuestras plantas sean rentables». Otro de los mecanismos para seguir siendo competitivos es seguir invirtiendo en los vehículos, ya que «la mayoría de los coches en Europa tienen más de diez años y no se puede comparar tecnológicamente ni de ningún modo con el nuevo Kuga». La mención al Kuga no fue baladí ya que Mulally se encontraba en Valencia, en visita privada, y aprovechó para mantener un encuentro con los jóvenes talentos emprendedores españoles, y también con el presidente de la Generalitat Valenciana. Un flamante Ford Kuga presidió ambas reuniones. Era un modelo de la «prefabricación», ya que este automóvil saldrá de la factoría de Almussafes el próximo mes de octubre «y se exportará a todo el mundo».

Mulally mostró su confianza en España y recordó la inversión de 1.200 millones de euros iniciada por Ford en la planta de Almussafes en 2009 y que se prolongará hasta 2015. En esa fecha, la factoría valenciana producirá el Kuga y también el C-Max, y la Transit Connect. El jefe de Ford se mostró contrario a la deslocalización, ya que fabricación e innovación deben ir unidas. Como unidas deben ir la fabricación y el montaje: «Cuanto más integrado estés, más valor añadido creas».

Mulally no cree que se vayan a acabar los combustibles fósiles en un futuro cercano «sino que habrá que pagar más por buscar y extraer nuevas bolsas». Pero por ello, Ford ha aceptado la premisa de que la energía va a ser cara «y esto nos permite reinventar la empresa y no hay que tener miedo» y habló de los motores más eficientes y se mostró convencido de que quedaba mucho camino por avanzar en el diésel. También consideró posibles grandes avances en la biomasa y el etanol. Para Mulally, la siguiente evolución será la electrificación e irá de forma conjunta a la mejora de las baterías. «Las baterías serán la tecnología habilitante, pero hay que saber si los gobiernos están dispuestos a construir la tecnología para recargar hidrógeno o electricidad».Anunció que «vamos a tener un Focus eléctrico en Europa».El ex ingeniero de Boeing dijo que «hay que hacer los coches aún más accesibles para que sean una extensión de nuestra vida». Y puso por ejemplo el nuevo Kuga.