Fin al «regalo» de portátiles: uno por cada tres alumnos y del centro

Sevilla- Las restricciones presupuestarias han acabado con la Escuela 2.0, uno de los proyectos estrella del anterior Gobierno que incluía un microordenador portátil para cada alumno de la escuela pública financiado de manera conjunta con las comunidades autónomas. El programa fue criticado por los docentes que consideraban que existían otras prioridades en la escuela, al tiempo que no se daban las condiciones para sacar provecho a una inversión que en el caso de la Junta de Andalucía alcanzó los 22 millones de euros durante el pasado ejercicio. Como el actual Ministerio de Educación decidió suprimir el programa, la consejera Mar Moreno barajó también la opción de desterrarlo. Finalmente no será así.

La Junta seguirá gastando dinero en portátiles. Pero como existen tensiones de tesorería, sólo invertirá cinco millones, que servirán para comprar 27.500 ordenadores. En realidad, ya con el curso empezado, se distribuirán 1.829 para alumnos de quinto de primaria. En el mejor de los casos, habrá uno por cada tres alumnos, que tendrán que compartirlos.

Además, en contra de lo que se venía haciendo hasta ahora, ya no serán propiedad de cada estudiante, sino que estarán adscritos al centro, que será el encargado de su custodia y mantenimiento. Se podrán solicitar como préstamo para trabajar en casa.
La Consejería de Educación quiere seguir abanderando este proyecto que nació durante la etapa del ex ministro Ángel Gabilondo. Según moreno, «el PP quiere volver a los años 60». En su momento, sindicatos de profesores como Apia denunciaron la ineficacia de estos portátiles que no eran compatibles con las aplicaciones informáticas en uso del sistema educativo y que ocasionó el desmantelamiento de otras aulas ya equipadas con ordenadores de sobremesa. También criticaron la falta de utilidad de la medida debido a que no se impartió la formación necesaria entre el profesorado.

Los concertados, fuera del reparto
Los nuevos portátiles no llegaran a las escuelas concertadas, ya que argumenta la Junta que el equipamiento tecnológico corresponde a estos centros. Una novedad con respecto al sistema anterior, que sí los consideraba parte del modelo. La Confederación Católica de Padres de Familia y Padres de Alumnos recurrirá la decisión.