Sevilla

Antonio Fernández concedió entre «300 y 400 ayudas excepcionales»

El ex consejero de Empleo Antonio Fernández, a su llegada ayer a la Audiencia Provincial
El ex consejero de Empleo Antonio Fernández, a su llegada ayer a la Audiencia Provinciallarazon

Sevilla- «Para mí la amistad es un valor muy grande. Es compañero y amigo». Éstas fueron las palabras que ayer pronunció el ex consejero de Empleo, Antonio Fernández, cuando el presidente del tribunal del «caso Mercasevilla», Ángel Márquez, le preguntó si conocía o tenía algún tipo de relación con el ex delegado de Empleo, Antonio Rivas.

De esta manera, defendiendo a su antiguo subordinado en la Consejería, arrancó el interrogatorio del ex alto cargo de la Junta de Andalucía, a quien precedieron como testigos ante el jurado el ex director general de la Consejería de Presidencia, Juan Gallo; el ex jefe de los servicios jurídicos de la Junta, Francisco del Río Muñoz; el ex sindicalista y «conseguidor» de los ERE Juan Lanzas; así como el ex viceconsejero de Empleo, Agustín Barberá. La participación de Fernández, quien fuera consejero entre el año 2004 y 2010, fue la más esperada de todas, ya que era él, en teoría, quien únicamente tenía la potestad para otorgar la subvención de 900.000 euros pedida por la Fundación Socioasistencial de Mercasevilla para montar allí una escuela de hostelería, que gestionaría el grupo La Raza, a cuyos dueños, los ex directivos de la lonja, Fernando Mellet y Daniel Ponce, pidieron supuestamente una comisión ilegal de 450.000 euros. De esta manera, reconoció que fue él quien «fijó la cuantía a subvencionar como consejero».

Lo hizo a preguntas del fiscal, quien le interrogó sobre la génesis del convenio entre Mercasevilla, los hosteleros y la Junta, y a lo que respondió que se trataba de una decisión tomada en «un contexto único» debido a la elevada necesidad de encontrar mano de obra cualificada y que con la escuela se pretendía lograr un «trabajador-llave en mano». Se trata de una actividad a la que estaba acostumbrado, pues durante el tiempo que estuvo en Empleo firmó entre «300 y 400 ayudas excepcionales» similares a la investigada.

Por otro lado, también aseveró que el proceso se paralizó debido a que Mercasevilla no aportaba la documentación requerida. En cuanto al intento de cobro de comisión, destacó que tuvo conocimiento de la trama por Gallo, aunque éste en su intervención aseguró que sólo lo había comentado con el responsable de los servicios jurídicos al que pidió consejo. De esta manera, el imputado en la trama de los ERE falsos, recalcó que en cuanto estuvo al tanto de todo ordenó denunciar los hechos. Por su parte, Gallo dijo que pidió a los empresarios que realizaran la grabación para tener una prueba, mientras que Lanzas negó que cobrara dinero alguno por asesorar a Mercasevilla durante el ERE de 2006 y para lograr la subvención de la escuela de hostelería.