Los 50 años de Zapatero

No hay mayor fortuna que cumplir años y sobre todo cuando se goza de buena salud. Los cincuenta años, según dicen, es una cifra muy simbólica. No lo sé porque me quedan décadas para llegar al medio siglo. Quizá me quedo con la edad actual. Estoy muy bien y por algo me llamo Cefas. Lo de medio siglo suena mal. Es casi una grosería llamar a un amigo y felicitarle por cumplir medio siglo. Creo que mi admirado vecino Ussía, que con la luz de su prosa eclipsa mi verbo pétreo, estará de acuerdo en que es una maldad que sólo cabe dedicarla a un enemigo muy querido. Zapatero cumple años y le felicito cortésmente. Está en un momento complicado. Las encuestas le son muy desfavorables. Al ser un optimista irredento espera que todo cambie antes del 2012. Por cierto, no piensa adelantar las elecciones. No le conviene. Lo que sí que tendrá que decidir es si se presenta. La verdad es que queda mucho partido y su rival confía demasiado en una victoria fácil. Le puede suceder como en 2004 y 2008.