Las cámaras captaban diez veces más multas de las que podían tramitarse

Sevilla- La quinta sesión de la comisión de investigación del Plan Centro evidenció ayer los «fallos» en la tramitación de las sanciones, aunque los comparecientes confirmaron el «correcto» funcionamiento de las cámaras. Los seis funcionarios que declararon y el director general de Sice –empresa que explotaba el sistema–, Ramón Cobo, confirmaron este extremo, si bien restaron credibilidad al informe que elaboró el jefe del Centro de Control de Tráfico, Enrique Gutiérrez, dado que se «extralimitó de sus funciones».

Según Cobo, todas las cámaras funcionaban, encontrándose «bien ubicadas y sincronizadas», y que el sistema, con una garantía hasta 2017, contaba con una fiabilidad entre marzo y mayo del 96,68 por ciento. También aclaró que el ciudadano «puede estar tranquilo porque las sanciones eran validadas después por un operador». «Gutiérrez ha puesto en entredicho el buen hacer de mi empresa a la ligera, siendo una de las máximas preocupaciones que he tenido en el tema laboral», añadió.

Por su parte, el operador del sistema, Ramón Suárez, aseguró que el sistema funcionaba «perfectamente» y podía llegar a captar más de 2.500 sanciones diarias, mientras que sólo 250 podían tramitarse por «limitación de personal» en la Agencia Tributaria y agregó que las listas de coches que se cotejaban con las sanciones no estaban actualizadas por «problemas administrativos». Suárez llamó la atención sobre el hecho de que Gutiérrez presentara el lunes imágenes de noviembre de las cámaras, ya que «no tiene acceso a ellas al no contar con la contraseña».