Valencia

El «Baby boom» del fútbol

Las victorias de la selección logran disparar la natalidad nueve meses después un 45%

El «Baby boom» del fútbol
El «Baby boom» del fútbollarazon

Madrid- Las victorias deportivas influyen indirectamente en la natalidad de una población al cabo de un tiempo. Así ocurrió en España tras la victoria del Mundial de Fútbol de Suráfrica 2010, según un estudio de Sex place, una empresa de productos eróticos de Valencia. En abril de 2011, es decir, nueves meses después del triunfo, la natalidad tuvo un incremento máximo del 45 por ciento, si bien «no existen datos oficiales y detallados», como informa Antonio David Cámara, demógrafo de la Universidad Autónoma de Barcelona. Según esta pauta, se prevé para el mismo mes de 2013 un efecto similar. Es importante resaltar este dato ya que, según el Instituto Nacional de Estadística (INE), en 2010 la relación era de 10,73 nacimientos por cada mil habitantes, siendo 2008 el año con la mayor tasa de crecimiento de los últimos veinte años. Estas estadísticas coinciden con el reciente descenso en la natalidad y el aumento de la mortalidad. Según los expertos, la tasa de «mantenimiento cultural» mínima –la permanencia de una cultura medida por los individuos de la misma– es de 2,2 hijos por pareja. En el 2008 era de 1,1. En el caso de los inmigrantes es diferente. Entre ellos también hay divergencias: la diferencia cultural, la mayor tradición familiar –sobre todo en el caso de los musulmanes– y el elevado número de hijos sitúa su tasa cerca del 5 en España, y del 7 en países como Francia. Para 2050, se estima que casi la mitad de la población que viva en la Unión Europea sea mayoritariamente musulmana.

 

EN PRIMERA PERSONA
«Nuestros hijos tendrán más cosas»

Raúl y Sara, un matrimonio madrileño, tuvieron a su hija en abril de 2011, nueve meses después del primer Mundial de fútbol que obtuvo nuestra Selección. Como a otros muchos, la victoria les sorprendió y les insufló ánimo. Ya no eran los eternos perdedores. Descubrieron que se pueden conseguir cosas que antes «ni soñábamos, y es más, eran inimaginables», dice Raúl. «A nivel internacional, es más complicado asumir ciertos logros, como en la actualidad los económicos, porque nunca es todo como lo pintan ni los medios ni los políticos», continúa. «Pero nuestros hijos crecerán en un ambiente en el cual nosotros no pudimos disfrutar por muchas cosas, y eso será muy positivo para ellos».