Educación

Operación antinovatadas

Operación antinovatadas
Operación antinovatadaslarazon

MADRID- Siempre han estado en el centro de la polémica. Las novatadas en los colegios mayores constituyen desde hace años una especie de tabú entre los colegiales, los directores de estos centros y las entidades universitarias de las que dependen algunos colegios. No están permitidas, nadie habla abiertamente de ellas, pero existen. El debate en torno a la necesidad de ser más duro con estas prácticas enfrenta a quienes las rechazan por considerarlas humillaciones hacia los residentes «novatos» y aquellos otros que quitan hierro al asunto y las defienden como la mejor manera de integrarse en el ambiente colegial.

Para dejar clara su postura en este tema, seis colegios mayores de la capital, Santo Tomás de Aquino (Aquinas), Isabel de España, Loyola, Elías Ahúja, Pío XII y Jaime del Amo, han hecho firmar a los alumnos que han pedido la renovación para el próximo año una carta en la que se comprometen a participar positivamente en la acogida de los nuevos colegiales y, al mismo tiempo, renuncian a cualquier forma de novatada. Estos centros han redactado un manifiesto en el que expresan su profunda preocupación «por una lacra que lleva muchos años minando su trabajo educativo, que a menudo provoca situaciones injustificadas de maltrato, acoso y/o humillación a los nuevos colegiales».

Los directores de estos seis colegios, todos ellos adscritos a la Universidad Complutense, aseguran que las novatadas se enmarcan en un contexto «de silencio y clandestinidad: existe una ley del silencio entre los colegiales sobre ellas y apenas hay denuncias porque hay miedo por parte de los que las sufren a ser excluidos y marginados». Y es que según ellos, no pueden catalogarse como «bromas inocentes, de mejor o peor gusto, que el nuevo colegial debe soportar como condición para ser aceptado. La integración de los nuevos puede y debe darse sin necesidad de este tipo de actos». Por todo ello, subrayan en el manifiesto su frontal rechazo a «todo tipo de novatadas, incluidas las aparentemente más inofensivas y adoptando las medidas más oportunas y eficaces».

Polémica en el Cisneros
Precisamente el debate en torno a las novatadas se convirtió, aunque de forma indirecta, en protagonista hace escasas semanas. Los colegiales del Ximénez de Cisneros, colegio de gestión directa de la UCM, denunciaron la nula disposición al diálogo del equipo rector dirigido por José Carrillo así como la falta de inversión en sus instalaciones. Entonces, el rectorado emitió un comunicado en el que sostenía que el clima de tensión tenía su origen en la decidida apuesta de la Complutense por erradicar «los actos de violencia física y psicológica» que suponen las novatadas y que, según el escrito, en el Cisneros se prolongan durante todo el año. Los colegiales de este centro, sin embargo, han reiterado en varias ocasiones su total disposición a colaborar con las autoridades de la UCM en este ámbito: «Expresamos nuestra más rotunda intolerancia ante los actos denominados como novatadas, y que van en contra de la convivencia en los valores y el espíritu de tolerancia, respeto y empatía».