La previsión de pérdidas permitirá el despido con 20 días de indemnización

MADRID- «Seis años de evasión, 15 días de atracón y 48 horas de sofocón para ver 344 enmiendas sobre una de las leyes más delicadas de la Legislatura». Con esta frase del popular José Ignacio Echánizo se resume bien la accidentada y precipitada tramitación parlamentaria de la reforma laboral impulsada por el Gobierno. Un texto que perseguía la creación de empleo y cuyo debate, sin embargo, ha estado sobre todo protagonizado por las causas de despido objetivo. La revisión se aprueba sin consenso político, sindical y social. De hecho, la reforma salió ayer aprobada de la Comisión de Trabajo del Congreso con el único voto a favor del PSOE. Y eso que el grupo que sostiene al Gobierno apuró hasta el último momento la negociación para atraerse el apoyo de los nacionalistas, que prefirieron quedarse en la abstención para no corresponsabilizarse de la reforma más dura del mercado de trabajo que se ha afontado en las últimas décadas. La abstención de PNV y CiU fue lo que facilitó en todo caso que la reforma saliera adelante. La izquierda, huelga decir que votó en contra, igual que el PP, que calificó el texto de «guiso incomestible» y de reforma «del despido y no del empleo».El proyecto de ley, que pasa ahora al Senado, donde deberá tramitarse en 20 días, ha añadido 33 enmiendas, entre ellas una que avala la posibilidad de despidos objetivos por pérdidas «previstas» o por la caída de los ingresos de las empresas. El despido objetivo, con indemnización de 20 días por año trabajado, también podrá estar motivado por ineptitud del trabajador, falta de adaptación, absentismo y necesidad acreditada de amortizar puestos de trabajo. La reforma incluye también que los inspectores de la Seguridad Social podrán emitir el alta médica a todos los efectos a partir del cuarto día de la baja firmada por los médicos de la sanidad pública (Insalud), en vez de los 14 días actuales. Y en materia de absentismo, será causa de despido objetivo la falta de asistencia al trabajo intermitente, aun justificada, que alcance el 20% de días hábiles en dos meses consecutivos o el 25% en cuatro meses discontinuos dentro de un periodo de un año, y siempre que el absentismo de la plantilla sea superior al 3%.

Derogada la ayuda a los autónomosLa Comisión de Trabajo aprobó ayer con los votos de PSOE y PNV y las abstenciones de ERC, IU-ICV y BNG una enmienda socialista al proyecto de ley de reforma laboral para eliminar la nueva prestación de 425 euros mensuales para autónomos en paro que no reciban ninguna ayuda económica. La prestación fue incluida hace una semana, a instancias de CiU, en la ley que regula la protección por cese de actividad de los autónomos. Y aunque el PNV votó en el Pleno a favor de la nueva ayuda, ayer sostuvo que aquella posición fue un error que había que subsanar porque perjudicará a las mutuas al tener que financiarla, ya que la redacción de la ley no obliga a Trabajo a hacer aportaciones.