Alonso a la expectativa

Un minuto después de acabar la triunfal carrera de Corea en la que Alonso dio un paso de gigante en sus aspiraciones al título, Ferrari y el propio piloto pidieron no levantar las campanas al vuelo. El título quedaba cerca, pero todavía restaban dos carreras importantes donde las combinaciones para ser campeón eran más bien irreales. Ganar la carrera y que Webber fuera quinto o peor. Sin embargo, después de lo visto ayer en la sesión de clasificación del Gran Premio de Brasil las cosas no serán fáciles y todo dependerá de otros muchos factores.

La lluvia complicó mucho la labor de los pilotos e ingenieros. Las condiciones de la pista fueron cambiando continuamente y esto benefició a unos y perjudicó a otros. En la Q2 los Ferrari sufrieron de lo lindo. Con neumáticos intermedios, tanto el F10 de Alonso como el de Massa demostró sus carencias. Todo lo contrario que el McLaren de Lewis Hamilton y los Red Bull, que siempre estuvieron arriba.

La tanda definitiva deparó no pocas sorpresas. La pista se fue secando y conforme pasaban los pilotos, los tiempos bajaban escandalosamente. Alonso fue el primero en salir y quizás ahí estuvo el error. Otros, como Hulkenberg, lo hicieron de los últimos y eso los llevó a lograr una increíble «pole position». Cuando la sesión tocaba a su fin, el piloto alemán de Williams pasó por la recta de meta con el tiempo prácticamente cumplido y eso le valió el mejor tiempo porque fue el último en rodar en las mejores condiciones posibles. En apenas unos segundos el asfalto mejoró y esto provocó que «Hulk» aventajara a sus rivales en nada menos que un segundo.

Alonso acabó quinto por detrás de Vettel, Webber y Hamilton, sus rivales en la lucha por el título. Hoy las previsiones apuntan a que la carrera se disputará en seco, algo que no viene bien a Ferrari. Alonso no tiene mucha intención de arriesgar y probablemente esperará acontecimientos. Hulkenberg desaparecerá a las primeras de cambio y en el paddock de Interlagos nadie duda de que los pilotos de Red Bull pueden protagonizar una pelea que puede ser histórica. Puede pasar de todo porque en el equipo les han dado vía libre. No hay órdenes de equipo.

El otro escollo que tendrá que afrontar Alonso será Hamilton, que definitivamente irá a por todas. La carrera promete ser dura para las mecánicas y ahí entrarán en juego el estado de los motores, que este fin de semana está provocando muchos quebraderos de cabeza. El bloque Mercedes de Hamilton parece que está en mejor estado, mientras que los Renault de Red Bull y los Ferrari presentan más dudas. Además, el coche italiano firma cierta desventaja en la velocidad punta, hasta 10 km/h menos que sus contrincantes, y eso puede pasarle factura en carrera.

El propio Alonso señaló al término de la sesión que «podía haber sido peor», un claro síntoma de que ayer las cosas no salieron bien y que el coche no está muy afinado para el trazado brasileño. Además, el factor lluvia desaparece hoy y en condiciones normales los Red Bull y los McLaren están un paso por delante en Brasil. Hacía muchos años que el mundial no llegaba a un final tan apretado con cuatro pilotos implicados en la lucha por el título. Hoy puede pasar de todo y vista la actitud de unos y otros, todo apunta a que el desenlace final se pospondrá una semana, cuando la F1 desembarque en Abu Dhabi.