Sevilla

Espadas acata el impopular «blindaje» del centro pero promete «flexibilidad»

Lamenta que el PP «no diga a los ciudadanos qué va a hacer, sino lo que no va a hacer» si gana en 2011.

Juan Espadas, candidato del PSOE, se paseó ayer con un coche eléctrico por la plaza de San Francisco
Juan Espadas, candidato del PSOE, se paseó ayer con un coche eléctrico por la plaza de San Franciscolarazon

SEVILLA- La rocosa defensa del Plan de Tráfico del Centro que viene haciendo el delegado de Movilidad, Francisco Fernández, no casa del todo con el afán electoral de Juan Espadas, candidato del PSOE a la Alcaldía. El alcaldable asume el fondo, pero cambia las formas. Es decir, defiende que el acceso al centro se restrinja tal y como dicta la impopular norma que «hereda», pero apela a «flexibilizar» sus prerrogativas.
En concreto, Espadas quiso «desdramatizar» ayer la medida asegurando que «no va a generar ningún trastorno, excepto a aquellas personas que sólo vienen a atravesar el centro con vehículos privados y los que no van a un parking y acaban aparcando sobre la acera».
Además, el candidato abrió la puerta a un período de «flexibilidad» sin concretar del cierre al tráfico. «No se va a sorprender a nadie ni imponer; no van a llegar multas de forma masiva al día siguiente», mantuvo. Espadas recordó que ya existía una normativa previa sobre restricciones de tráfico al centro –incluso con el Gobierno del PP– y que «este plan recupera estas normas, que no son una novedad, y aplica la tecnología a un sistema que permite ordenar el flujo de vehículos al centro».
El socialista incardinó la medida en una «planificación de años». «Nosotros no improvisamos, mientras otros dicen que cuando lleguen al Gobierno lo quitará, pero hay que decir a los ciudadanos qué se va a hacer, no lo que no se va a hacer», expresó en referencia a la intención del alcaldable del PP, Juan Ignacio Zoido, de revocar la iniciativa si alcanza la Alcaldía en 2011.


Un alcaldable «eléctrico»
El candidato del PSOE a la Alcaldía, Juan Espadas, se suma al furor municipal por la «sostenibilidad» y, para hacer visible su apuesta ecologista, ha optado por trocar el coche oficial por un coche (también oficial) «eléctrico». El candidato anunció ayer que se moverá con un vehículo recargable de color rojo mientras dure la precampaña y la campaña electorales. Todo ello para «seguir insistiendo en la modificación de los hábitos de conducta» a fin de «mejorar la calidad del aire» en la capital.