Todo está pactado

La izquierda abertzale estará en las municipales porque buena parte del PSE ha adquirido ese compromiso con los ex batasunos y ahora es imposible dar marcha atrás. Por eso llevan meses defendiendo la presunta «sinceridad» de Sortu no sólo Eguiguren y los suyos, sino el propio lendakari López y destacados miembros de su Gobierno, amén de ministros tan renombrados como Francisco Caamaño. Cierto que Sortu no podía presentarse como tal a los comicios, sobre todo después de la resolución contraria del Supremo. Pero nada dirán con relación a Bildu, invento de Eusko Alkartasuna para meter en las instituciones a los proetarras y beneficiarse de camino de su tirón electoral.

En la medida en que buena parte de los candidatos de Bildu tengan vinculación con ETA, el Gobierno debería impugnar esa candidatura. No lo va a hacer, porque está pactado cierto margen de maniobra para que la izquierda abertzale no se aleje de las instituciones. Se repetirá, por tanto, el bochorno de ANV. Los proetarras seguirán en los ayuntamientos vía Bildu, con la excusa de que EA es un partido democrático. Ciertamente lo es, pero en la medida en que persigue un interés electoral sirviéndose de personas que no condenan el terrorismo, está vulnerando la Ley. EA puede concurrir sola o con otros partidos democráticos, pero no con proetarras en sus listas.
Aunque el Gobierno ya tiene decidido que lo va a permitir.