Hamás
Israel suaviza el bloqueo a Gaza
Netanyahu levanta, tras dos días de debate, el embargo sobre bienes de consumo y materiales para la construcción civil. Hamas califica el avance de «insuficiente»
Jerusalén- El Gobierno de Benjamin Netantyahu anunció ayer un plan para relajar la entrada de bienes de consumo a la franja de Gaza y mejorar las condiciones de vida sus habitantes. Después de dos semanas de críticas internacionales hacia el bloqueo que Israel mantiene sobre esta zona desde hace tres años para evitar el rearme del grupo terrorista Hamas, que controla el territorio desde 2007, y tras dos días de intensas reuniones del Gabinete de Seguridad, un comunicado de la Oficina del primer ministro informaba de la decisión de liberalizar el sistema actual. Estará a partir de ahora permitida la entrada de más bienes de consumo y la de materiales como cemento y acero para la reconstrucción civil de la franja –aunque sólo para proyectos controlados por Naciones Unidas.Tras atender de esta forma al clamor de la comunidad internacional para mejorar la situación humanitaria de Gaza, Netanyahu espera a cambio que ésta «interceda para la liberación del soldado Gilad Shalit», secuestrado por Hamas desde hace casi cuatro años y al que no se le permiten visitas de personal de la Cruz Roja o la entrega de correspondencia.Lo que no se cambiará con la nueva medida es el control que hasta ahora realiza el Ejército israelí para evitar la entrada de armas y material de guerra. Asimismo, se mantendrá la zona de exclusión marítima que tantos sobresaltos le han traído en los últimos 15 días desde que la llamada «Flotilla de la libertad» desafiara la medida. En los próximos días, el Gobierno decidirá cómo se pondrá en práctica la nueva medida, pero se prevé que si, hasta ahora, había un catálogo de objetos permitidos, el nuevo sistema permita el acceso sin límite de cantidad de cualquier producto –tras la correspondiente inspección–, salvo los incluidos en una escueta «lista negra». La decisión regularizará un repertorio cada vez más arbitrario que, a día de hoy, prohibía las patatas fritas, las galletas o la carne fresca, pero permitía otros alimentos menos esenciales como el yogur desnatado o el té. Aparte de a cualquier tipo de comida, los habitantes de Gaza tendrán acceso a juguetes, material de papelería, utensilios de cocina, colchones y toallas.Por su parte, Hamas calificó ayer el anunció israelí de flexibilización del bloqueo como «propaganda mediática» y pidió un levantamiento total de la medida. El portavoz de Hamas en Gaza, Sami Abu Zuhri, dijo que suavizar las restricciones es un «intento de legitimar el bloqueo» y, añadió, que la mayoría de los artículos que a partir de ahora podrán disfrutar los habitantes de la franja «no son necesarios en Gaza». Por último, añadió que el bloqueo no es sólo una cuestión de bienes de consumo, sino de flujo de personas y dinero. El enviado especial del Cuarteto, Tony Blair, saludó la suavización del embargo y pidió la liberación de Shalit para que se «produzcan más avances».
Protesta contra la integraciónCientos de miles de judíos ultraortodoxos se manifestaron ayer para protestar contra el fin de la segregación en las escuelas femeninas entre askenazíes y sefardíes. Ochenta padres se enfrentan a penas de cárcel por negarse a que sus hijas compartan las aulas con niñas sefardíes. Para las familias askenazíes, descendientes de Europa, los sefardíes, de origen regional, no son lo suficientemente religiosos. «No quiero que mi hija vaya al colegio con niñas que ven la televisión», comentó ayer uno de los manifestantes a la cadena británica BBC.
✕
Accede a tu cuenta para comentar