Prevención

Los españoles tardan 75 minutos en avisar de los síntomas de un infarto

Los españoles tardan una media de 75 minutos en avisar al sistema sanitario cuando tienen síntomas de padecer un síndrome coronario agudo (infarto o angina de pecho), una de las claves del retraso que se produce en la atención médica, que se sitúa en más dos horas.

Así se deduce de los últimos datos del estudio ARIAM (Análisis del retraso en el Infarto Agudo de Miocardio), un registro de la Sociedad Española de Medicina Intensiva, Crítica y Unidades Coronarias (SEMICYUC) que lleva 15 años funcionando, y que han sido dados a conocer hoy por los doctores José Cuñat y Francisco Felices.

Desde la solicitud de asistencia hasta que ésta se produce transcurren 16 minutos de media, mientras que el intervalo desde el inicio de los síntomas hasta la llegada al hospital es de 165 minutos.

Una vez en el centro, la realización del electrocardiograma se produce a los ocho minutos, lo que demuestra la eficacia del sistema sanitario, ha señalado el doctor Cuñat, vicepresidente de la SEMICYUC.

Este médico intensivista del Hospital La Fe de Valencia ha insistido en la importancia de las primeras fases para actuar al hablar de la "hora de oro".

En el mismo sentido, el doctor Felices, jefe del Servicio de la UCI del Hospital Reina Sofía de Murcia, ha señalado que el tratamiento del síndrome coronario agudo requiere rapidez de actuación. 

Los pacientes con infarto de miocardio agudo "se benefician mucho si les abrimos las arterias ocluidas", y los que sufren angina de pecho "si actuamos para que no se cierre del todo la arteria".

El 30% de las personas que sufren un infarto fallecen antes de llegar al hospital, mientras que un 90% de los que ingresan sobreviven.

Ese 10% de mortalidad podría reducirse "notablemente"si disminuyera el tiempo que el paciente tarda en avisar a los servicios sanitarios, ha asegurado el doctor Felices, quien ha considerado que eso solo puede lograrse con "educación, educación y educación".

Del análisis de los datos de casi 2.500 pacientes que ingresaron con síntoma coronario agudo en los 85 hospitales españoles que han adoptado el registro ARIAM entre el 1 de febrero y el 30 de abril de 2009, se deduce que 3 de cada 4 eran hombres, con una media de edad de 63 años.

La edad media de las mujeres, que representan el 24,11% de los casos, se sitúa en los 69 años.

Las mujeres, que tardan más en avisar a los servicios médicos, están protegidas gracias a los estrógenos, una protección que desaparece con la menopausia. De todos los pacientes, un 42,4% no contaban con historia previa de cardiopatía isquémica.

No obstante, todos ellos tenían factores de riesgo como tabaquismo (57%), hipertensión arterial (54,6%), colesterol (45,7%), diabetes (30,4%), obesidad (10,6%) e historia familiar (10,6%), lo que el doctor Felices denomina "el asesino silencioso". Sólo un 5,5% no presentaba ninguno de estos factores de riesgo.