La mirada valiente

Si hablamos de fotografía, la llegada del World Press Photo a la capital constituye, sin duda, el acontecimiento de la temporada. Su primera escala es el Centro Cultural Moncloa, en donde permanecerán las 160 instantáneas que integran la exposición hasta el 17 de este mes. El prestigioso certamen de fotoperiodismo tiene en esta ocasión un marcado acento español, ya que dos fotógrafos de nuestro país fueron galardonados. Samuel Aranda logró la Fotografía del Año al ilustrar la Primavera Árabe mediante el retrato de una madre que sostenía en brazos a su hijo herido en la ciudad yemení de Sanáa. A pesar del peligro evidente que implica capturar imágenes como ésta, Aranda, que publicó esta fotografía en «The New York Times», subraya que todo ello va con el oficio: «Con el paso del tiempo hemos perdido muchos compañeros, así que somos conscientes del peligro al que estamos expuestos, pero esta profesión la escoges tú». Por su parte, Joan Costa logró el segundo premio en la Categoría de Naturaleza con una fotografía de una Heteropoda –un microorganismo marino– realizada en el transcurso de la expedición científica Malaspina, organizada por el CSIC. Junto a las obras de los fotógrafos españoles, otras 160 imágenes que resumen los acontecimientos más relevantes de 2011, desde el tsunami de Japón a la masacre de Utoya o las revoluciones que sacudieron a buena parte de los países árabes. Se trata en muchos casos de imágenes duras e impactantes que ilustran situaciones de tensión y de miedo como bombardeos o masacres, pero que subrayan al tiempo el papel clave de los profesionales de la fotografía a la hora de transmitir lo que sucede en cualquier rincón del mundo. Para ilustrar la magnitud del certamen que organiza World Press Photo, una organización sin ánimo de lucro fundada en Ámsterdam, baste señalar que en 2011 participaron 5.247 fotógrafos de 124 países con un total de 101.254 imágenes.