El PP confía en que el juez siga investigando y aclare el delito

MADRID– Al candidato del PSOE a la presidencia del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, le faltó ayer tiempo para intentar volver contra el PP la decisión del Pleno de la Audiencia Nacional sobre el chivatazo a ETA. En el Congreso de los Diputados, reprochó al partido de Rajoy sus «calumnias e insultos», que atribuyó, por cierto, a una supuesta maniobra del principal partido de la oposición para poner piedras cuando «se está a punto de acabar con ETA».
«Y eso es lo que más me entristece», señaló en una puesta en escena en la que no sólo no hizo autocrítica porque desde el Estado de Derecho se avisase a una organización terrorista de que se iba a por ella, sino que se presentó como la víctima, junto al ahora ministro del Interior, de una operación de acoso y derribo. «El PP me ha calumniado e insultado, a mí y al secretario de Estado (el hoy ministro Antonio Camacho), sesión tras sesión, y ha arrastrado por el suelo el honor de policías muy serios, sabiendo que todos los etarras fueron detenidos y procesados», añadió, informa Ep. Fueron detenidos, tiempo después, pero también es cierto que desde la lucha antiterrorista se ha denunciado que de esa operación se obtuvieron muchos menos resultados de los esperados –entre otras cosas en la documentación incautada– porque ETA ya estaba al tanto.
Mariano Rajoy, por su parte, mostró su respeto a la decisión de la Audiencia Nacional, con la confianza en que el juez siga investigando y aclare qué ocurrió y quiénes son los responsables del delito del que se ven indicios. Asimismo, señaló que su partido sigue esperando explicaciones políticas por parte de Rubalcaba, aunque no cree que vayan a producirse. El PP también reclamó ayer a la Fiscalía que siga trabajando para que respondan los verdaderos culpables.

El candidato sigue sin saber nada
Alfredo Pérez Rubalcaba sigue sin saber nada del «Faisán». Ni sabe ni se arrepiente. Ahora dice que todo lo que ha ocurrido responde a una maniobra en su contra porque el PP no quiere que llegue el final de la banda terrorista.