Barcelona

Montilla mantiene la incógnita electoral pero descarta octubre

 José Montilla sigue siendo el único que sabe cuándo se celebrarán las elecciones catalanas. Ayer, todos esperaban que el presidente de la Generalitat confesara el secreto más codiciado por las cocinas de los partidos políticos catalanes, la fecha de la cita en las urnas.

Montilla deja las elecciones catalanas para noviembre
Montilla deja las elecciones catalanas para noviembrelarazon

Pero Montilla no desveló la incógnita. Habló de que el tripartito todavía tiene mucho trabajo por hacer, de que el «españolismo rancio» favorece el independentismo y de que el estilo de hacer política «cada vez más radical» de Artur Mas poco se parece al de Jordi Pujol.

También habló de las elecciones, dijo que no se celebrarán el 7 de noviembre, coincidiendo con la visita del Papa Benedicto XVI a Barcelona. Y precisó que tiene muy en cuenta el calendario de acontecimientos de este otoño, como el derby Barça-Real Madrid, que se jugará el fin de semana del 28 de noviembre. Aunque entre las prioridades de Montilla está la lucha contra la desafección, el presidente apostilló que «la convocatoria de las elecciones no es incompatible con el Barça-Real Madrid».

El presidente no descarta convocar elecciones el 28 noviembre, que toma fuerza después de que ayer quedara venciera el plazo para convocar el 24 de octubre. Para que la cita con las urnas fuera el 24 de octubre, Montilla tendría que haber firmado la convocatoria para que hoy saliera publicada en el Diario Oficial de la Generalitat. La Ley de Régimen Electoral General obliga a convocar elecciones 54 días antes de la fecha electoral.

La oposición, partidaria de que los comicios se celebraran cuanto antes mejor, se saltó a la yugular de Montilla. CiU, PP y Ciutadans le reprocharon que alargue la «agonía» por tacticismo. Los sondeos no sonríen al PSC y a nadie se le escapa que le interesa ganar tiempo para intentar acortar distancias con CiU. Alicia Sánchez-Camacho reprochó a Montilla que ha cometido su último error, lo mismo opina Mas, quien auguró que viviremos una «agonía»


PSC y CiU se lanzan una opa hostil
Pese a la crisis económica, después de la sentencia del Estatut, la precamapaña electoral gravita sobre la convocatoria de un referéndum independentista. ERC ha logrado situar la propuesta en el centro del debate político poniendo como condición para pactar ya sea con PSC e ICV, como con CiU, que la próxima legislatura se celebre un referéndum por la independencia. Aunque Artur Mas ya ha dicho que la sociedad catalana no está suficiente madura para afrontar esta aventura, desde su mismo partido, Felip Puig flirtea con la propuesta. El PSC no sólo la rechaza sino que ayer lanzó una opa a los votantes de CiU desorientados con el «giro radical» de los nacionalistas.