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Los AVE no rentables se llevaron la inversión para el Corredor Mediterráneo

Exigen que en 2013 esté finalizada la construcción de una vía para mercancías de Cartagena a la frontera.

Francisco García, Javier Rodríguez, Joan Amorós y María del Mar Rivas, ayer en el Colegio de Ingenieros Industriales
Francisco García, Javier Rodríguez, Joan Amorós y María del Mar Rivas, ayer en el Colegio de Ingenieros Industrialeslarazon

Ramales de tren de alta velocidad sin rentabilidad ninguna se quedaron con una inversión que debería haber sido para el Corredor Mediterráneo. El secretario general de la asociación empresarial Ferrmed, Joan Amorós, aseguró ayer que la crisis actual sería «más llevadera» si esta infraestructura estuviese construida y no se hubiese dado prioridad a la red radial del AVE. «Las inversiones no se deben hacer únicamente pensando en la cohesión territorial, sino también teniendo en cuenta la rentabilidad económica».

En este sentido, instó al Gobierno central a cumplir de manera estricta un calendario de obras, que debe iniciar independientemente de que la Comisión Europea declare prioritario el eje ferroviario que va de Cádiz a Estocolmo.

La primera actuación debe ser el cambio de vía o la puesta en marcha de un tercer carril entre el puerto de Barcelona y Bollet y entre Girona y Figueres, y su ampliación hasta Cartagena. Esta actuación tendrá un coste de 2.350 millones y puede estar finalizado en 2013.
Posteriormente, han de construirse las circunvalaciones ferroviarias para Valencia y Barcelona, así como la mejora de la vía hasta Almería y Cartagena (2017) y Algeciras, en 2020, fecha en la que estaría completado todo el Corredor Mediterráneo.

No obstante, el compromiso del Gobierno central sigue sin pasar de las palabras. Amorós admitió que el ministro de Fomento, José Blanco, se ha comprometido a defender la inclusión de la red que afecta al Corredor Mediterráneo como itinerario preferente en Europa, pero sigue sin poner en marcha actuaciones, y el plan de mercancías presentado recientemente tampoco convence. «No deja claro si va a realizar un cambio de ancho de vía o un tercer carril» y la conexión de Europa con nuestras fronteras es fundamental.

A este respecto, uno de los socios fundadores de Ferrmed y miembro de la Junta de Gobierno del Colegio de Ingenieros Industriales, Francisco García, explicó que sin el mismo ancho de vía los trenes pierden mucho tiempo en la frontera, ya que hay que ir levantando vagón a vagón para cambiar los ejes o mover con grúa los contenedores a otro tren.

Por su parte, el vicedecano de los ingenieros industriales, Javier Rodríguez, instó al Gobierno a invertir en actuaciones que permitan reducir el paro y advirtió de que si la Unión Europea no consigue poner en marcha infraestructuras como ésta, vivirá de la caridad de los países emergentes.


Manifiesto para presionar en Bruselas
Ferrmed, un «lobby» formado para defender el Corredor Mediterráneo, presentó ayer el manifiesto que se leerá en Bruselas el próximo 12 de enero en el Parlamento Europeo. Esta infraestructura supondrá un ahorro de 67.000 millones de euros en el periodo de 2016 a 2045, puesto que se emitirá menor cantidad de dióxido de carbono a la atmósfera, se implicará menos mano de obra en el transporte y se disminuirá el tiempo empleado para mover las mercancías. A la Comunitat Valenciana le corresponderán 19.000 millones y el PIB aumentará un uno por ciento. La tasa de rentabilidad del proyecto será del 11,1 por ciento, por lo que es susceptible de que la iniciativa privada quiera participar en su construcción, si el Gobierno se lo permite.