Medio Ambiente inicia un plan de prospecciones contra el siluro en L' Albufera

VALENCIA- Los estragos del tan temido mejillón cebra se quedan en nada si se comparan con el daño que puede producir el siluro. Ambas especies, llegadas del Ebro donde también son una plaga, son altamente destructivas. La presencia del siluro en L' Albufera ha desatado todas las alarmas y, por ello, la Conselleria de Infraestructuras y Medio Ambiente inicia hoy un plan de prospecciones para localizar los ejemplares siluro.

Esta es la primera medida acordada ayer con la Cofradía de Pescadores de Palmar, Silla y Catarroja, que colaborarán de manera activa con el Consell en la detección de ejemplares de siluros mediante las artes tradicionales de pesca. Las prospecciones se coordinarán desde el Centro de Investigación Piscícola de El Palmar y en ellas participarán el equipo de este centro, las Brigadas de Biodiversidad de Valencia y un equipo del Proyecto Life Trachemys. Los trabajos se completan con las prospecciones de 26 acequias del ámbito del Parque, principalmente en los términos de Sueca, Sollana, Silla y Albal.

El siluro puede llegar a alcanzar 100 kilogramos de peso y las historias sobre lo que es capaz de comer han forjado su fama de depredador. En del Delta del Ebro en su estómago se han encontrado pájaros por lo que su presencia amenaza también a las anátidas.