Otra orden de alejamiento burlada

«No la defiendas que es una hija de puta». Éstas son las palabras con las que Juan Rey, de 59 años, se refería a su ex mujer, Nadia Sabir Sabir, de 44 años, cuando un vecino del inmueble en el que vivían en Badajoz, al oír alboroto, salía a la escalera para ver qué pasaba. Y lo que pasó, la mañana de ayer, fue que Juan mató a Nadia, de nacionalidad marroquí, de un disparo de pistola en la cabeza.

A continuación, se suicidó tirándose por la ventana del piso, un 4º, a un patio interior. Los hechos ocurrieron sobre las 09:10 horas de ayer jueves en un edificio situado en el número 107 de la calle Ricardo Carapeto, una vez que la mujer regresaba de llevar al colegio a la hija que tenían en común, de nueve años, ya que el presunto agresor la estaba esperando.

«Riesgo no apreciado»
El hombre, según confirmó la delegada del Gobierno en Extremadura, Carmen Pereira, tenía orden de alejamiento en vigor, aunque aclaró que el pasado mes de septiembre se había reducido de «riesgo medio a riesgo no apreciado». La mujer había denunciado varias veces a su ex pareja por amenazas.

 La Policía investiga la procedencia de la pistola con la que el hombre presuntamente mató a su ex mujer, ya que se sabía que tenía una escopeta que, precisamente, se le había retirado y no saben dónde podría haber conseguido el arma corta con la que disparó. Pereira también señaló que fueron los vecinos de la víctima los que avisaron a los agentes de la autoridad de lo ocurrido.

Nadia es la primera víctima mortal por violencia de género que se produce en Extremadura este año, y si se confirma que también es un caso de este tipo el de la desaparición de la mujer de Boadilla del Monte (Madrid), «ya serían 70» las muertes por violencia de género en España en lo que va de año.

Entre ellas, 19 había denuncia a su maltratador, de acuerdo con el Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad. De ellas, al igual que Nadia, otras 12 mujeres tenían medidas de protección en vigor, lo que no impidió a sus agresores acabar con sus vidas. Como Juan Rey, otros 11 maltratadores se suicidaron.

Pajín se queda sin propuestas
- La casualidad quiso que ayer, día en que se confirmó el último caso de violencia de género y se investigaba otro, fuera la primera vez que Leire Pajín comparecía en el Congreso para hablar de Igualdad. A la ministra le tocó iniciar su charla con una «condena absoluta» al crimen de Badajoz. Eso sí, las propuestas en la materia fueron difusas: se quedaron en la promesa de facilidades para que las víctimas consigan empleo y en una «búsqueda de fórmulas» para proteger a los menores víctimas de maltrato. Pajín, además, hizo un llamamiento a que se denuncie pues «sólo» 19 mujeres asesinadas en este año (el 27,5 por ciento) lo habían hecho.

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