F.C. Barcelona

Bello mosaico

La Razón
La RazónLa Razón

Los socios y aficionados del F.

C. Barcelona son extremadamente

obedientes. Reconozco

que el mosaico dibujado en

el Camp Nou en los prolegómenos

del partido Barça-Real Madrid

no ofrece motivos para la crítica

artística. Espectacular dominio del

borreguismo forofo que culmina

con una estimable exposición colorista.

Decenas de miles de hombres

y mujeres maduros elevando con sus

manos una cartulina de color –grana,

azul, amarilla o carmesí–, nos emocionaron

con su disciplina. Hermoso

escenario de masas. Luz y sonido,

ambiente y color. Emocionante

también la expresión de Oleguer

Presas, el reivindicativo futbolista

del Barça, al que envío desde aquí mi

más sincero pésame. Como todo español

sensible, mi entusiasmo artístico

quedó fascinado con el mosaico.

Un corte de luz me impidió seguir lo

secundario, es decir, el partido. Me

comenta el travestí que domina la

esquina de mi calle que el Real Madrid

ganó. A expensas del mosaico y

de la fabulosa colaboración de cien

mil aficionados aborregados por la

causa. En conclusión, siete puntos

de ventaja. A pesar del mosaico y de

la «República Catalana del Barça».

Año nuevo, vida nueva. ¡Tururú!