Investigan si la velocidad causó el siniestro de autocar con 6 muertos

Barcelona- Regresaban en autocar de una plácida excursión de un día a Barcelona dentro de unas vacaciones que disfrutaban en la costa gerundense, pero una curva cerrada y unas causas que aún se desconocen tiñieron la jornada de negro y provocaron el siniestro mortal que la madrugada de ayer conmocionó a la pequeña población costera de Sant Pol de Mar (Barcelona). Un accidente múltiple entre un autocar y dos turismos causó la muerte de seis turistas holandeses y una setentena más resultaron heridos –27 de ellos están ingresados en 10 hospitales catalanes, 11 están graves, entre ellos un niño holandés–.

Curva peligrosa

La tragedia sucedió a las 23.13 horas, cuando por causas que aún se investigan, el autocar –de dos plantas, con todas las medidas de seguridad y con apenas dos años de antigüedad– se salió de la vía en una curva cerrada de la salida del autopista C-32 de Sant Pol de Mar. El vehículo invadió el sentido contrario y volcó por su lado izquierdo, para finalmente caer de lado y chocar contra la barrera de seguridad. Estuvo a punto de caer por un terraplén pero le salvó impactar contra la valla lateral de la vía y chocar ligeramente contra un turismo que viajaba en sentido contrario.

Los Mossos, tras descartar un fallo técnico ya que los neumáticos estaban en buen estado y el vehículo era bastante nuevo y contaba con todas las medidas de seguridad, apuntan a un posible exceso de velocidad en la curva o un error humano como causa del accidente. Para los agentes, determinar la velocidad a la que iba el autocar siniestrado será un «elemento fundamental de la investigación», ya que la misma noche del accidente «se comprobaron marcas en la vía, y el equipo de investigación también estudia los elementos mecánicos del autocar, aunque no hay indicios de avería mecánica», indicó el subjefe de Tráfico de los Mossos, Vicenç Gasulla. De hecho, uno de los heridos, tras el accidente, dijo que el vehículo iba «muy rápido».

 La curva en la que aconteció la tragedia, según informó el director del Servicio Catalán de Tráfico, Josep Pérez Moya, no es un punto negro, aunque si se sobrepasa la velocidad que marca la vía –40 kilómetros por hora– se puede volver mortal.

La segunda hipótesis que la Policía Autonómica baraja es la del error humano, inducido por un despiste, un problema de salud, somnolencia o que un animal se cruzara en las vías. El cuerpo policial indicó que necesitarán dos días para poder analizar las marcas de los neumáticos en la vía y el tacógrafo, que quedó levemente dañado por el siniestro.

El conductor, que está grave y tuvo que ser operado de urgencia y sufre rotura de tibia y peroné, dio negativo en la prueba de alcoholemia y cuenta con 15 años de experiencia en la compañía Plenacosta, que era la propietaria del vehículo. Los agentes de los mossos pudieron interrogarle levemente antes de que fuese ingresado, según informó Gasulla, pero no les pudo aportar ninguna información.

En el vehículo viajaban 65 turistas franco-holandeses, dos de los viajeros eran niños, y un alemán, el conductor y un guía. Los turistas estaban alojados en hoteles de Lloret de Mar, Blanes y Girona. Pese a que los datos sanitarios facilitados por el departamento de Presidencia hablan de 68 personas implicadas en el siniestro –66 pasajeros, el conductor del autocar y el del turismo afectado–, la empresa Plenacosta mantiene que en el vehículo tan sólo viajaban 63 turistas, el conductor y un guía.

La compañía emitió un comunicado en su página web en el que expresó su «mas sincero apoyo a los familiares de las víctimas y heridos» y mostró su agradecimiento a « todos los dispositivos de emergencia por su rapidez, profesionalidad y humanidad en las labores de rescate».

Los turistas provenían de una excursión organizada por la tour operadora holandesa Sundio, que quiso expresar sus condolencias a los familiares de las víctimas mediante un comunicado. El autocar contaba con cinturones de seguridad, aunque queda por confirmar si los ocupantes lo llevaban abrochado, causa que los agentes de la Policía Autonómica también investigan.

El siniestro es el más grave en lo que va de año y eleva a 12 las víctimas mortales por este tipo de accidentes en las carreteras. Durante 2009 tres siniestros más han causado víctimas mortales.