Educación
Los niños aprenden primeros auxilios en el colegio
Un programa de la Semfyc enseñará a los escolares entre 11 y 12 años a practicar la reanimación pulmonar para evitar casos de muerte súbita
Los ciudadanos son tan importantes como los médicos en la cadena de supervivencia. Muchos de los 16.000 casos de muerte súbita que hay cada año en España podrían evitarse si la reanimación cardiopulmonar se produce en presencia de alguien con unos conocimientos básicos de soporte vital. Según multitud de experiencias y trabajos publicados, los niños de 11 ó 12 años se encuentran en condiciones de recibir un curso de soporte vital básico y ya desde los siete pueden empezar a familiarizarse con estas técnicas. Según el doctor Luis Aguilera, presidente de la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria (Semfyc), «si se adaptan los mensajes resulta posible ir preparando a los niños para saber actuar ante un problema inesperado, como puede ser un atragantamiento o una hemorragia». Características Para ello, la Semfyc distribuirá en los colegios interesados el programa Esvap en la escuela, un material multimedia dirigido a niños de educación primaria en cuyo diseño han participado pedagogos, maestros, técnicos de emergencias, enfermeros y médicos. «De esta manera, queremos conseguir un doble objetivo: por un lado, que los alumnos de 7 a 10 años tengan su primer contacto con las emergencias y las técnicas de reanimación cardiopulmonar y, por otro, que los que han cumplido ya 11 años reciban un curso de soporte vital básico», explica el doctor Juan Antonio Cordero, del Grupo de Urgencias y Atención Continuada (GUAC) de Semfyc. Los expertos cifran la probabilidad de supervivencia en una parada cardiorrespiratoria entre el 0 y el 20 por ciento, mientras que si se aplican de forma precoz las técnicas de soporte vital, dicha probabilidad puede aumentar hasta superar el 40 por ciento. El programa consta de un cd que incluye videos, diapositivas y juegos interactivos con los que, además de permitir a los profesores, previamente formados, enseñar a los alumnos cómo identificar una parada cardiorrespiratoria y qué acciones seguir y en qué orden, se favorece también, según el doctor Aguilera, «el desarrollo, que es clave a estas edades, de una actitud solidaria. Toman conciencia de que su actuación es importante, que pueden hacer algo positivo ante una complicación inesperada».
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