Iglesia Católica

Multitudinario encuentro en Madrid en apoyo a la familia cristiana

Más de dos millones de personas, según los organizadores, participaron hoy en la madrileña Plaza de Colón en el encuentro 'Por la familia cristiana', un acto promovido por el Arzobispado de Madrid y secundado por comunidades religiosas de toda España, que contó con la presencia de unos cuarenta cardenales y obispos y representantes de una treintena de movimientos, asociaciones y realidades eclesiales.
Oficiado por el cardenal arzobispo de Madrid, monseñor Rouco Varela que aseguró que «esta es una celebración litúrgica de la Iglesia en España. La concentración no es política, sino por la familia, el matrimonio y su derecho a la educación de sus hijos», el acto se dividió en dos partes.
En la primera que transcurrió desde las once a las doce de la mañana, se dio la bienvenida a los asistentes antes de proyectar dos vídeos de Juan Pablo II, entre ellos el de su homilía en la madrileña Plaza de Lima el año 1982. Después un joven, un matrimonio y unos abuelos ofrecieron su testimonio personal sobre la familia. Entre otros también tomó la palabra el presidente del Foro de la Familia, Benigno Blanco que reclamó «el derecho de los padres de educar a sus hijos en la herencia cultural religiosa».
Posteriormente, el presidente de la Conferencia Episcopal, Ricardo Blázquez, tomo la palabra para explicar que «la familia está fundada sobre el matrimonio, que es la unión estable de un varón y una mujer para transmitir la vida a sus hijos».
El obispo de Bilbao apuntó también que «da la impresión» de que al hablar de familia cristiana como familia «tradicional» se contrapone ésta a «una supuesta familia moderna, pero la palabra tradicional aplicada a la comunidad formada por el marido y la mujer con los hijos no significa la familia superada por el correr del tiempo, anacrónica y trasnochada». Por su parte, el arzobispo de Valencia, cardenal Agustín García-Gasco, ha apuntado que los ataques a la familia cristiana que a su juicio protagonizado el Gobierno, son contrarios a a Constitución y «conducen a la disolución de la democracia». «La cultura del laicismo radical es un fraude y un engaño, no construye nada, sólo desesperanza por el camino del aborto y del divorcio exprés», añadió el arzobispo.
En este mismo sentido, el arzobispo de Toledo, Antonio Cañizares, aseguró que la familia se ve sacudida en sus cimientos por «graves amenazas» y por legislaciones «injustas e inicuas».

 Luchar por la familia
El momento cumbre del acto llegó cuando se realizó una conexión en directo vía satélite con el Vaticano para escuchar un mensaje del Papa Benedicto XVI. Tras saludar «a los participantes en el encuentro de las familias de Madrid, junto a los cardenales, obispos y sacerdotes que les acompañan», Benedicto XVI invitó a las familias cristianas «a experimentar la presencia amorosa de Dios en sus vidas» y a «que den testimonio en el mundo de la belleza de la familia» que definió como «la unión indisoluble del hombre y la mujer para acoger la vida humana desde su inicio hasta su final», por lo que «por eso los padres tienen el derecho y la obligación de educar a sus hijos en los valores de la fe».
«Luchar por la familia vale la pena», dijo el Santo Padre antes de recordar que «es bueno trabajar por la vida, porque eso es lo mismo que trabajar por el ser humano».
A los niños, el Papa les dijo «que quieran y recen por sus padres y hermanos», a los jóvenes les pidió que «estimulados por sus padres sigan su vocación matrimonial y religiosa», y dirigiéndose a los esposos les dijo: «Contad siempre con la gracia de Dios para que vuestro amor sea fecundo y fiel en las manos de María».

Dios es familia
La segunda parte de la concentración, que comenzó al mediodía y terminó pasadas las dos de la tarde. Se inició con la intervención de los líderes de los movimientos eclesiales.
«La familia no está superada. No es bueno que el hombre esté sólo y por eso Dios le ha dado una ayuda con la familia a partir de su matrimonio con la mujer. No es posible construir un mundo humano sin la familia. Sin la familia la vida no tiene casa. El mundo necesita más familia», dijo Andrea Riccardi en representación de la Comunidad de San Egidio.
Por su parte Julián Carrón, de Comunión y Liberación aseguró: «Nos hemos reunido para manifestar el bien que significa para nosotros la familia. La familia es un bien por el que estamos agradecimos y queremos compartir y transmitir a nuestros hijos».
José Gómez Arguello Wirtz, más conocido como Kiko Arguello, responsable de Camino Neocatecumenal, apuntó que «estamos ayudando a la familia en Europa, porque Europa lo necesita». Asimismo, recordó la palabras de Juan Pablo II cuando dijo «que el futuro de la humanidad pasa por la familia» y añadió que «Dios es familia y los hijos son un don de Dios y deben ser educados en la fe de sus padres porque tienen un destino glorioso, la vida eterna».

 Familia como núcleo fundamental de la sociedad
Continuó la Jornada con una procesión con la imagen de la Virgen de la Almudena, para posteriormente realizar la celebración de la Palabra antes de escuchar la homilía del cardenal arzobispo de Madrid, monseñor Rouco Varela.
Para Rouco Varela, en nuestro país «el ordenamiento jurídico ha dado marcha atrás con respecto a la declaración universal de los derechos humanos fijados hace 60 años por la ONU, porque la familia es el núcleo fundamental de la sociedad y tiene derecho a ser protegida».
Entre las organizaciones que apoyaron el acto figuran la prelatura del Opus Dei y la mayoría de Universidades católicas de España, además de los miembros del Camino Neocatecumenal, comúnmente conocidos como «kikos», y asociaciones como Acción Católica, Foro de la Familia, Schoenstatt, Cursillos de Cristiandad, Comunión y Liberación, Regnum Christi, Renovación Carismática y Comunidad de San Egidio.