Spanair estrenará la T-1 el 17 de julio con un vuelo de Barcelona a Madrid

El vuelo de Spanair JKK 401 con destino Madrid estrenará el 17 de junio la nueva Terminal 1 del aeropuerto de Barcelona. Saldrá a las seis de la mañana y será la primera operación de las 240 programadas para el primer día de funcionamiento de la T-1. El director del aeropuerto de El Prat, Fernando Echegaray, explicó ayer que durante esta primera jornada pasarán por la nueva terminal 30.000 pasajeros y que se transportarán 17.000 maletas.

A los viajeros que tengan previsto un vuelo desde la T-1, les aconsejó «venir con tiempo». Los que vayan en coche tendrán que tomar la C-31, además, podrán estrenar el nuevo aparcamiento de la T-1, que dispone de 11.000 plazas. Quienes opten por el transporte público, estrenarán un servicio de autobuses lanzadera que conectará las dos terminales cada siete minutos.

Las compañías que integran Star Alliance –Spanair y Lufthansa, entre otras– inaugurarán la T-1. Durante el verano, Star Alliance, que representa el 30 por ciento del volumen previsto en la terminal operará sola. Spanair trasladará a la nueva terminal 16 aeronaves, 500 equipos de tierra y cerca de 1.200 empleados, según informó ayer el presidente de la compañía, Ferran Soriano.

Traslado escalonado

Soriano dijo que es una «oportunidad» estrenar las nuevas instalaciones. Hasta finales de septiembre, no desembarcarán las aerolíneas de OneWorld (Iberia y Vueling) y a finales de año, las de SkyTeam (Air Europa). Cuando la T-1 funcione a pleno rendimiento, concentrará el 80 por ciento del tráfico de El Prat. Las terminales A, B y C se quedarán con el 20 por ciento de los vuelos restantes y Aena aprovechará para hacer mejoras. Aunque a medio plazo se espera que con la puesta en marcha de la T-1, El Prat tenga 55 millones de pasajeros al año, en 2008 pasaron 30 millones y las previsiones para 2009 no son optimistas, pues se espera cerrar el año con 28 millones de pasajeros.

Soriano dijo que el «propósito» de Spanair es hacer de Barcelona un «hub» con vuelos de corto y largo recorrido. Sobre el supuesto trato de favor de Aena –parte del capital de Spanair es público–, Soriano señaló que «no se justifica» porque la participación institucional es de un 3,5 por ciento.