Siria
A bordo del campo de refugiados flotante
LA RAZÓN sube al barco griego que acoge en la isla de Kos a 1.500 sirios
LA RAZÓN ha subido a bordo del «Eleftheros Venizelos», el barco fletado por el Gobierno heleno hace unos días que ahora sirve de campo de refugiados flotante. Es la primera vez que un periodista accede a su interior, pues las autoridades prefieren esconder las ventajosas condiciones en las que viven los refugiados, todos sirios, y evitar así mayores tensiones entre el resto de inmigrantes de otras nacionalidades.
En los descansillos se aglomeran decenas de sirios que buscan su nombre en una lista, donde aparecen las personas que recibirán el permiso de tres meses ese mismo día, un documento necesario para poder abandonar la isla. Varios miembros de Acnur entregan los papeles en una de las salas principales, donde se forma una inmensa cola. Paseamos con Zahi, el hombre que nos ayuda a introducirnos, quien asegura sentirse aliviado después de haber huido de Alepo. Es padre de dos hijos, de 3 y 2 años, y escapó de Siria pese a disponer de ahorros para quedarse. Una vez en Europa se ha convertido en un «número», como él mismo lamenta, escrito a bolígrafo en el papelito que sirve de «carné» y salvoconducto para ingresar al barco.
✕
Accede a tu cuenta para comentar