Brasil

“El Amazonas se quema porque necesitamos consumir proteínas en forma de filetes”

Entrevista con Miguel Ángel Soto, responsable de la campaña de Bosques de Greenpeace

Un bombero durante las labores de extinción de un incendio en el Amazonas/AP
Un bombero durante las labores de extinción de un incendio en el Amazonas/APlarazon

Entrevista con Miguel Ángel Soto, responsable de la campaña de Bosques de Greenpeace

En los últimos días, todo el globo ha sentido la emergencia que se cernía sobre “el pulmón del planeta”. Se han hecho populares las especulaciones sobre cuáles son las causas del pico de incendios en el Amazonas, sobre si las informaciones eran solamente una campaña política contra el presidente brasileño; o si no se hablaba de otros incendios porque en esas zonas no gobernaba “el enemigo público número uno”(Bolsonaro). Miguel Ángel Soto, responsable de la campaña de Bosques de Greenpeace, explica qué significa la destrucción de la selva amazónica, cuáles son las causas del repunte de incendios y qué podemos hacer, como ciudadanos, para atajar el problema.

¿Por qué tiene tanta importancia la Amazonía para el medio ambiente?

La cuenca del Amazonas es la principal región de bosque tropical del mundo, es el ecosistema más complejo y con la mayor biodiversidad; posee la mayor variedad de especies vegetales, de insectos, hongos, animales, bacterias (...) Además, también hay que tener en cuenta la riqueza cultural de la zona, donde habitan varias tribus indígenas. También son muy importantes desde el punto de vista de los recursos genéticos, hasta el punto de que las empresas farmacéuticas buscan en estas zonas muchos principios activos que pueden tener aplicaciones médicas y buscan los conocimientos médicos ancestrales de los pueblos indígenas. Pero quizás lo más importante es que, junto con los océanos, los bosques tropicales son los grandes reguladores del clima. Generan dinámicas de vientos y de circulación atmosférica que permiten que el clima funcione de la forma en la que lo conocemos: una de las aportaciones más importantes de la Amazonía es que el agua que se evapora en la selva tropical, forma las nubes y las corrientes de vapor de agua que se desplazan por todo el cono sur americano, y que luego cae en forma de lluvia, regando los cultivos y permitiendo el abastecimiento de agua potable a millones de personas. Los incendios en la cuenca del Amazonas emiten gases de efecto invernadero. Y si aumentan estos gases, el clima se hace cada vez más seco; y con ello, la selva también se seca, por lo que es más fácil que se produzcan incendios. Esencialmente es un circulo vicioso: mayor cambio climático genera mayores incendios.

¿Cuál es el área afectada?

La cuenca del Amazonas abarca varios países, entre ellos Venezuela, Colombia, Perú, Ecuador, Bolivia (...) y evidentemente, Brasil. Solo en la Amazonía brasileña cabe todo el continente europeo, desde el Estrecho de Gibraltar hasta los Urales en Rusia. La cuenca Amazónica contiene el 20% de agua dulce del planeta, lo que la hace sumamente importante para el cambio climático.

¿Qué es lo que ha provocado este repunte en los incendios? ¿tiene que ver con la política desreguladora de Bolsonaro?

Sin duda. Si bien la deforestación es un problema endémico entre los países de la zona, Bolsonaro ha empleado un discurso político destinado a desmantelar todo el aparato legal y todas las instituciones que tienen como objetivo la defensa del medio ambiente. Mandó mensajes defendiendo que había demasiadas zonas protegidas, y que los pueblos indígenas tenían demasiados derechos, lo que terminaba por entorpecer la agricultura y la ganadería del país: El IBAMA (Instituto Brasileño del Medio Ambiente y de los Recursos Naturales Renovables) ha sido apartado del organigrama de Gobierno; la Fundación Nacional Indígena (Funai) ha recibido recortes; y el Instituto de Investigaciones Espaciales (INPE) -un organismo de alta tecnología con varios satélites en órbita- ha visto cómo Bolsonaro despedía a su director porque los datos mostraban un incremento en la deforestación de la región.

¿Qué medidas pueden acabar con los incendios y con la deforestación?

En Brasil hay una legislación en vigor que no permite un avance de este tipo de la frontera agrícola y que solo permite convertir la selva en territorio agrícola en un porcentaje limitado. Para transformar la selva hacen falta permisos. Y en caso de incumplimiento se deben poner multas, debe actuar la Policía Federal y las instituciones. Lo que hace falta es que se restituya el Estado de Derecho y que Bolsonaro deje de enviar mensajes de que se puede hacer lo que se quiera. La Comunidad internacional también le está exigiendo a Bolsonaro cumplir con el acuerdo de París como condición para mantener en vigencia el Mercosur. Cree que puede actuar por sí solo, y no entiende que vive en un entorno global: si quiere firmar acuerdos comerciales, tiene que cumplir con unas reglas. Por lo que tiene que realizar un giro político hacia la realidad institucional, abandonando el populismo, y sobre todo, convencerse de que el enemigo no son las oenegés.

Hemos visto que hay muchos más focos de incendios en otros lugares, como en Angola o en República Democrática del Congo, ¿estos incendios son menos importantes que los de la Cuenca del Amazonas?

En África podemos encontrar muchos focos, pero en cada latitud hay que ver qué es lo que está ardiendo, y cuáles son las causas; porque no tienen las mismas consecuencias para el medio ambiente. Los incendios de estas zonas tienen que ver más con la quema de zonas agrícolas porque se quema el pasto para eliminar los rastrojos, cómo han hecho históricamente los agricultores una vez ha terminado la recogida de los cultivos. Es un fuego que avanza muy rápido, pero que no tiene los mismos efectos que tiene la quema de la selva amazónica en cuanto a la emisión de gases de efecto invernadero, destrucción de biodiversidad, en términos de consumo de carbono (...) No es lo mismo quemar un cuadro que he pintado yo, que quemar el museo del Prado.

¿Hay algo que pueda hacer la comunidad Internacional para solventar el incremento de estos incendios (los de todo el globo)?

Claro. Es necesario que la deforestación y el fuego se conviertan en un problema de índole mundial. Son necesarias medidas como el del Fondo Amazónico, que estaba destinado a proyectos a largo plazo en el Amazonas, a políticas de conservación y protección, a la generación de modelos de desarrollo sostenible (...). Aunque países como Angola o República Democrática del Congo necesitarían mucho más que Brasil, los esfuerzos económicos de la Comunidad Internacional. Estos fondos se podrían utilizar para ayudar a capacitar a la gente, para monitorear el fuego, buscar alternativas para eliminar los rastrojos de los cultivos, (...) Hay un informe que lanzó Naciones Unidas a principios del mes de agosto (informe suelos y cambio climático), que habla de una cosa muy importante: si queremos acabar con la deforestación, debemos cambiar nuestra dieta, porque existe una relación directa entre nuestra forma de vivir el consumo de carne, y el cultivo de soja en las zonas que se están quemando: Brasil es uno de los grandes exportadores de la soja que va destinada a alimentar la ganadería intensiva en España, que es el principal productor de piensos con soja: nuestras vacas, nuestros cerdos, nuestras ovejas y nuestros pollos comen soja que procede de las zonas donde se deforesta y se quema. Se quema la selva porque nosotros necesitamos consumir proteínas en forma de filetes, de chuletas, de hamburguesas, (...)