El declive del zar del siglo XXI

- ¿La OTAN hubiera reforzado sus posiciones en los países del este europeo si Rusia no se hubiera implicado en el conflicto ucraniano?

–La guerra de Putin contra Ucrania y su implacable poder militar en el este de Europa ha generado un ejemplo clásico de retroceso para la propia Rusia. Se puede decir que a Putin le ha salido el tiro por la culata. En lugar de aumentar la seguridad de Rusia, la agresividad del líder ruso ha aumentado los miedos de Occidente y sus movimientos por contrarrestar la provocación rusa, lo que a su vez está alimentando la paranoia dentro de Rusia, al mismo tiempo que está produciendo que se cumpla una profecía que necesita de una respuesta rusa vigorosa.

- ¿Será Rusia un país más inseguro?

–Esta situación sólo contribuirá a reducir aún más la seguridad de Rusia, poniendo a Occidente y a los vecinos de Rusia en contra del propio Kremlin, aislándola estratégicamente. La consiguiente carrera armamentística iniciada por Putin llevará al país a la bancarrota porque su economía está en retroceso y también porque Putin ha decidido imprudentemente atemorizar a sus vecinos.

- ¿Hasta dónde puede llegar esta nueva carrera armamentística?

–Occidente –tanto Estados Unidos como la Unión Europea– es infinitamente más ricos y posee la capacidad y los medios para mantener una carrera armamentística de este tipo. Como resultado, Rusia –al igual que la Unión Soviética en la época de Breznev– declinará y entrará posiblemente en una situación de colapso. Mientras tanto, esta acumulación de armas de la que hace gala Moscú afectará a la capacidad del Ejército ruso de hacer la guerra en Ucrania y, con ello, acelerará «la congelación del conflicto» ucraniano. Con todo, Putin está actuando de forma irracional y contrapruducente al dañar en primer lugar los intereses de la propia Rusia.

- ¿Veremos a militares de la OTAN algún día en territorio ucraniano?

–No, no existe la posibilidad de que la OTAN envíe fuerzas armadas a Ucrania. Sin embargo, cada vez existe un mayor apoyo tanto político como intelectual para respaldar el envío de armas a Ucrania, y en este sentido la presión a Obama es cada vez mayor. Los que se oponen al envío de armas argumentan que una iniciativa así supondrá una escalada de la violencia, pero en realidad Rusia ya ha aumentado la tensión, aunque Occidente no hace nada por ayudar militarmente al Gobierno de Ucrania.

*Profesor de Ciencias Políticas en la Universidad de Rutgers en Estados Unidos. Preguntas de Goyo G. Maestro