Crítica de libros

El líder moral de Arabia Saudí: prohibir conducir a las mujeres no deriva de la «sharia»

La ley no escrita de Arabia Saudí que prohibe conducir a las mujeres no refleja ningún texto de la 'sharia', el código legal islámico que supone la base para la mayoría de leyes saudíes, según ha reconocido este martes el líder de la policía moral, Sheik Abdulatif al Sheij.

"La sharia islámica no tiene un texto que prohiba a las mujeres conducir", ha afirmado Al Sheij, que fue nombrado por el rey Abdulá hace un año para liderar la Comisión de la Promoción de la Virtud y Prevención del Vicio, el nombre formal para la policía religiosa.

Pese a estas afirmaciones, Al Sheij ha precisado que su papel como líder de la policía moral no puede hacer política sino ejecutar las reglas y leyes del reino. Además, ha asegurado que desde que ocupa el cargo ninguna mujer ha sido detenida por conducir y que no estaba al tanto de los sucesos antes de su nombramiento.

Pese a que Al Sheij no tiene potestad para cambiar la política sobre este asunto, sus comentarios podrían introducir el debate sobre esta medida en el país, donde varias mujeres han sido detenidas por incumplirla.

Aunque Arabia Saudí no ha escrito un código legal con los textos que componen la 'sharia' sus clases política y judicial han impuesto durante mucho tiempo la prohibición de conducir a las mujeres, justificando esta medida con las costumbres conservadoras del país.

Incluso sin una legislación específica que prohíba a las mujeres conducir, las mujeres que han desafiado esta medida han sido arrestadas y acusadas de varios cargos, entre ellos causar desorden público.

La policía moral de Arabia Saudí surgió en los años 30 para reforzar la moral pública de acuerdo a la estricta interpretación de la ley islámica. Actualmente es una rama del Estado, con personal permanente y presupuesto anual.

Las reformas emprendidas por el rey Abdulá, como el nombramiento de mujeres para el Consejo de la Shoura y la promoción del empleo femenino, han provocado una fuerte oposición entre los conservadores del clero del país.

Las organizaciones que defienden los derechos de las mujeres en Arabia Saudí han solicitado en numerosas ocasiones que se cambie la normativa. Además de no poder conducir, las mujeres saudíes necesitan la aprobación de un familiar masculino, conocido como su 'guardián', para viajar, conseguir un trabajo, abrir una cuenta bancaria o poder someterse a algunas cirugías electivas.