«Era luz en la oscuridad»

SOWETO- A las nueve y media de la mañana, en la iglesia católica Pío XII de un suburbio de Pretoria llamado Waterkloof no cabía ni un alfiler. Era la segunda misa que oficiaba el prior Anselmo para recordar a Madiba. Durante la misa, imágenes del ex presidente se proyectaban en una pantalla y niños de todas las razas presentaban sus ofrendas al líder fallecido. Esta imagen se repitió en decenas de templos y sinagogas de todo el país. Fue el primer gran acto colectivo. En este templo de oración se vieron lágrimas de emoción cuando el sacerdote resaltó en su homilía las bondades de Nelson Mandela. El prior de la Iglesia Franciscana recuerda a LA RAZÓN una de las frases de Madiba que más le ha emocionado: «Los enemigos de mis amigos no son mis enemigos». «¿Ves qué tipo de persona era Madiba? Una persona que quiere a todo el mundo, eso es paz». A la Iglesia Metodista de Bryanston acudieron el presidente Zuma, ministros, familiares del fallecido y su ex mujer Winnie, vestida de luto. En Regina Mundi, el sacerdote Sebastian Roussouw se refirió a Mandela como «una luz en la oscuridad».