Europa

Bruselas

España y otros ocho países presentan el Instituto Europeo para la Paz

Los ministros de Exteriores de nueve países europeos han presentado oficialmente el Instituto Europeo para la Paz, un nuevo organismo que pretende prevenir, gestionar y resolver los conflictos a nivel global.

Los ministros de Exteriores de nueve países europeos, entre ellos el español José Manuel García-Margallo, presentaron hoy oficialmente el Instituto Europeo para la Paz (EIP, en sus siglas en inglés), un nuevo organismo que pretende prevenir, gestionar y resolver los conflictos a nivel global.

Suecia, Italia, Finlandia, Bélgica, Luxemburgo, Suiza, Hungría, Polonia y España forman parte de la iniciativa, que aspira a convertirse en "un instrumento de la diplomacia informal europea", dijo en rueda de prensa el titular sueco de Exteriores, Carl Bildt.

Precisó que el EIP "no es una institución de la UE", aunque tendrá una clara relación con la Unión Europea, y subrayó que incluye a un país extracomunitario con amplia experiencia en la resolución de conflictos, en referencia a Suiza.

El presidente del nuevo instituto, Staffan de Mistura, explicó que el principal objetivo del mismo será "contribuir y complementar la agenda global de paz para Europa, y sin duda para la UE, a través de la mediación operativa y del diálogo informal".

Entre otros ámbitos, el EIP participará en "la rápida movilización de expertos para mediar en la prevención de conflictos", ayudará a llevar a cabo análisis de crisis en tiempo real y asistirá en "la formación operativa para individuos y organizaciones"en el ámbito de la mediación.

El organismo apoyará, además, con medios financieros a los actores involucrados en la prevención de conflictos y en los procesos de paz, añadió su presidente.

Dotado con un presupuesto anual de tres millones de euros, el instituto contará con una plantilla de veinticinco personas, algunas de las cuales ya han sido designadas, indicó Mistura.

El instituto actuará por decisión propia o en respuesta a las propuestas de organismos europeos u otras partes, en función de la situación y del carácter del conflicto.