Fin de la «pax americana»

- ¿Cuál es el propósito de la vuelta de Obama a Irak?

–Siente que necesita hacer algo, así que ha enviado aviones para bombardear las posiciones del Estado Islámico. Se trata más bien de una intervención de cara al público. Obama no quiere enviar tropas norteamericanas a Irak, así que se decantará por ayudar a sus amigos, los kurdos, y a intentar establecer un gobierno fuerte en el país.

- ¿Los bombardeos serán efectivos?

–Los bombardeos no son efectivos contra las fuerzas que tiene destacadas el Estado Islámico. El EI no es un ejército. Lo único que se puede hacer es matar al líder de este grupo terrorista, Baghdadi, pero eso es difícil.

- ¿La situación en Siria y ahora la guerra en Irak demuestran que la estrategia de EE UU para Oriente Próximo ha fallado?

–Eso es. El intento de construir y reconstruir un estado iraquí, invirtiendo miles de millones de dólares, no ha dado resultado. No se puede forjar en diez años una identidad nacional ni reconstruir una nación ni instaurar una democracia, eso es algo que lleva más tiempo.

- ¿Qué salidas tiene la Administración norteamericana en la zona?

–Lo único que puede hacer es desconectarse de esta región problemática e intentar ayudar a sus aliados en la zona –Arabia Saudí, Jordania, Israel...–, además de rehacer las buenas relaciones con el general Al Sisi en Egipto.

- ¿Se han roto las fronteras de Oriente Próximo tal y como fueron concebidas hace cien años?

–Quizá, lo cual representa un desafío. Pero si Bachar al Asad gana la guerra en Siria y un nuevo Sadam Hussein aparece en Irak, el actual sistema puede seguir funcionando. Pero sí que estamos ante el final de la «pax americana».

*Decano de la facultad de Humanidades en Tel Aviv. Preguntas de Goyo G. Maestro