Internacional

Italia pedirá revisar algunas «condiciones» económicas europeas

Avanza que dirá «no» a algunas exigencias por el bien de su país

El vicepresidente y ministro de Desarrollo Económico de Italia, Luigi di Maio, hoy, en Roma
El vicepresidente y ministro de Desarrollo Económico de Italia, Luigi di Maio, hoy, en Romalarazon

El vicepresidente y ministro de Desarrollo Económico de Italia, Luigi di Maio, expresó hoy su intención de renegociar con la Unión Europea (UE) algunas «condiciones» económicas y avanzó que dirá «no» a algunas exigencias por el bien de su país.

El vicepresidente y ministro de Desarrollo Económico de Italia, Luigi di Maio, expresó hoy su intención de renegociar con la Unión Europea (UE) algunas «condiciones» económicas y avanzó que dirá «no» a algunas exigencias por el bien de su país.

«Debemos mantener las cuentas pero sabemos que si queremos a Italia, y nosotros la queremos, y deseamos sacar adelante proyectos económicos, debemos renegociar a nivel europeo algunas condiciones que Italia no puede sostener más», dijo ante 1.500 empresarios.

El nuevo ministro, que juró el cargo el pasado viernes, adelantó que esto se hará «dialogando con los otros países pero también diciendo no».

Di Maio apostó seguir la misma firmeza que el otro vicepresidente del Gobierno y ministro del Interior, Matteo Salvini: «En estos días ha bastado que dijera que no estaba de acuerdo con el Reglamento de Dublín y ha saltado la intención de la UE de reformarlo», celebró.

Se refería al hecho de que la Unión Europea, en un Consejo sobre Justicia y Asuntos de Interior en Luxemburgo, mostrara discrepancias en relación a los cambios en el sistema de asilo de inmigrantes del Reglamento de Dublín, muy criticado por Italia.

«No creo que se deba amenazar. Simplemente cuando no vemos el interés de los italianos, detengámonos en las negociaciones», señaló el ministro de Desarrollo Económico, Trabajo y Políticas Sociales.

Di Maio dijo que pretende seguir esta estrategia en asuntos económicos y también en la protección del «Made in Italy» para proteger la artesanía, el sector agroalimentario, la industria creativa y la innovación tecnológica del país.

«Querría ir a ver lo antes posible qué productos prohibidos por la UE pasan igualmente por los puertos del norte de Europa, llegan hasta aquí y destruyen la economía» italiana, advirtió.

El ministro italiano, entre aplausos, criticó que «siempre se dice que es culpa» de las aduanas italianas, que son «un colador», pero señaló que existe «un sistema aduanero y portuario europeo que debe estar mucho más atento y respetar las leyes vigentes».

«No pedimos hacer nuevas leyes, decimos al menos respetar las leyes que dicen que algunos productos no pueden entrar en nuestra economía porque han sido creados a un tercio del coste laboral sin normas de seguridad y por eso cuestan una décima parte de los productos italianos, alemanes o franceses», exigió.

Y zanjó: «Iremos a esa mesa de negociación con el máximo del diálogo pero también con la firmeza de un Gobierno consciente de que representa a la segunda fuerza manufacturera europea». EFE