La crisis de la basura desata la ira en Líbano

«Esperamos una manifestación multitudinaria. Al menos de 20.000», explicó a la RAZÓN Asad Thebian, uno de los organizadores del movimiento «Ustedes Apestan». «Hemos organizado autobuses para que vengan a apoyarnos desde diferentes partes del país. La respuesta ha sido muy positiva. Ésta será la manifestación más grande del Líbano desde 2008», aseguró Thebian. Esta plataforma civil junto con el movimiento «Eco Líbano» y «Queremos transparencia» han convocado a las 18:00 horas local de hoy una protesta para exigir «la dimisión del ministro de Medio Ambiente, Nouhad Machnouk, sobre el que se ha abierto una investigación criminal por la brutalidad de las Fuerzas de Seguridad contra los manifestantes y una solución para la crisis de la basura y la celebración de elecciones parlamentarias», señaló Thebian. «Al principio, las protestas empezaron por la basura, pero estamos hartos de la corrupción de nuestro Gobierno y pedimos que dimita», exigió el líder de uno de los movimientos antigobierno que participan en las protestas.

El pasado fin de semana el centro de Beirut se convirtió en una batalla campal entre manifestantes y Fuerzas de Seguridad. Incluso el Ejército deplegó tanques por las calles de la capital. El movimiento «Ustedes Apestan» y otras asociaciones civiles organizaron unas protestas para exigir al Gobierno que ponga fin a la crisis de las basuras, que desde hace un mes ha transformado muchos barrios de la capital en un auténtico estercolero. El origen de todo esto son las nuevas licitaciones para la empresa que gestiona las basuras, y que anteriormente pertenecía a la familia del ex primer ministro Rafic Hariri. Tras el cierre del principal basurero el mes pasado, la basura se acumula por montañas en las calles y muchos vecinos tuvieron que quemar ellos mismos los desperdicios. Las manifestaciones que en un principio iban a ser pacificas fueron fuertemente reprimidas por el Ejército libanés, que no dudó en utilizar gases lacrimógenos, balas de goma y cañones de agua para disipar a los manifestantes.

A pesar de que se trata de una protesta ciudadana sin tintes políticos, algunos partidos enviaron a sus agitadores para incendiar la violencia. Según fuentes de la organización, los disturbios de esta semana dejaron más de 400 heridos.