La incertidumbre sobrevuela Atenas

- ¿El adelanto electoral era la única opción para Alexis Tsipras?

–Con el acuerdo con los acreedores europeos para un tercer programa de rescate y después de las prolongadas negociaciones de seis meses, el Gobierno de Alexis Tsipras, y él personalmente, ha sido objeto de constantes críticas desde el núcleo duro de su propio partido, Syriza. Cuando el Parlamento griego votó por el nuevo programa de rescate, 47 de los 149 diputados de su partido no le apoyaron; y tuvo que recurrir a los partidos en la oposición para lograr el respaldo necesario (Pasok, Nueva Democracia y To Potami). Aquí se vio un giro de 180 grados desde su retórica preelectoral y populista, que causó una grieta importante dentro de su partido.

- ¿Fueron las negociaciones del tercer rescate lo que quebró definitivamente a Syriza?

–Lo que ha pasado en Grecia es que, en esencia –aunque no formalmente– el Gobierno ha perdido su mayoría en el Parlamento. Con esta escena las opciones disponibles para Tsipras eran pocas y muy difíciles. Su último cartucho era buscar una nueva coalición e incluir otras partes, como el Pasok o To Potami, pero eso lo habría sepultado en su partido. Por lo que lo único que pudo hacer fue convocar elecciones anticipadas. Si Tsipras hubiera seguido en el poder habría sido perjudicial para una economía ya de por sí debilitada por los controles de capital impuestos como resultado de la negociación que hicieron unos aficionados con sus socios europeos.

- ¿Qué significan para un país como Grecia, debilitado después de la crisis, unas elecciones anticipadas?

–Actualmente, el principal problema de Grecia no es tanto la economía como la incertidumbre política que se ha acentuado por las grietas dentro del partido en el poder. Una grieta que es muy profunda y que no puede ser reparada. La realidad es que, a lo largo de las últimas semanas, Tsipras dirigía un Gobierno de minoría en un partido dividido. Las elecciones representan una situación política que tiene que ser resuelta antes de que cualquier Ejecutivo se inicie en la aplicación de unas reformas difíciles y unas medidas de austeridad que se necesitan con el fin de poner a la economía griega de nuevo en el mapa.

- ¿Quién puede ser el próximo primer ministro de Grecia? ¿Hay otra opción para el país?

–Aunque es difícil predecir el resultado de las elecciones, es muy probable que Tsipras encabece de nuevo en el Gobierno heleno. Actualmente disfruta de una fuerte popularidad entre el electorado griego y aunque las elecciones no hacen más que formalizar el divorcio entre las facciones de extrema izquierda en el partido Syriza, el 20 de septiembre se dividirá en dos o más partes. A día de hoy Tsipras es políticamente mucho más fuerte que sus rivales, tanto dentro su propio partido como en comparación con otros líderes del resto de partidos. La gran desventaja de Nueva Democracia es que es un viejo partido que todavía tiene que recuperar su lugar dentro del electorado griego, que aún lo sigue asociando con el viejo y corrupto sistema político que provocó el colapso económico del país.

*Prof. de Política Económica en la Universidad de Tesalia, en Grecia. Preguntas de Taylin Aroche