Espionaje en EEUU

La NSA cede ante Merkel

La agencia plantea reducir las escuchas a líderes extranjeros el día que llega la delegación alemana. EE UU hackeó Google y Yahoo

El presidente y la canciller conversan en el balcón de la Cancillería en Berlín, en junio
El presidente y la canciller conversan en el balcón de la Cancillería en Berlín, en juniolarazon

El jefe de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA), Keith Alexander, defendió ayer –justo el mismo día en que una delegación de europarlamentarios era recibida en la Casa Blanca para pedir explicaciones por el escándalo del espionaje– la necesidad de reducir las operaciones de vigilancia sobre los líderes extranjeros. «En algunos casos, la alianza con nuestros socios es más importante», dijo en un acto en Washington en referencia a las exigencias de Berlín de que no se vuelva a espiar a dirigentes de la UE. Alexander reconoció que es necesario limitar este programa de vigilancia en aras de mantener las relaciones diplomáticas. En un gesto de la Casa Blanca para rebajar el malestar que hay en la UE, los eurodiputados fueron recibidos en una sala junto al Despacho Oval. Sin embargo, las explicaciones dadas no parecen haber satisfecho las expectativas de la delegación de 23 parlamentarios europeos que se han reunido con congresistas y miembros de la Administración norteamericana. Elmar Brok, presidente del comité de Exteriores del Parlamento Europeo, criticó que la NSA esté tratando ahora de repartir la responsabilidad al asegurar que el espionaje masivo estaría basado en fuentes de inteligencia de sus socios europeos.

Pero quizá la reunión más importante que se celebraba ayer en Washington es la que se disponía a mantener la delegación del Gobierno alemán enviada por Angela Merkel, formada por el coordinador de los servicios secretos, Günter Heiß, y el consejero de política exterior, Christopher Heusgen. Berlín ha pedido unas reglas de juego sobre espionaje tras concocerse que el teléfono de la canciller fue pinchado por la NSA. No vale el argumento de que «siempre ha habido espionaje», afirmó Brok. «Debe haber reglas, estándares», indicó ante los periodistas.

Fuentes consultadas por LA RAZÓN destacaron que «da la sensación de que hay una guerra civil entre la Casa Blanca y los servicios de inteligencia. Sobre todo por cómo se ha abordado todo este asunto», indicaron en referencia al revelador testimonio de Alexander el martes ante el Comité de la Cámara de Representantes. El jefe de la NSA dijo que las informaciones de que EE UU ha recopilado millones de datos de países europeos son «completamente falsas» y que han sido socios de la UE los que decidieron compartir información.

Obama, por su parte, ha intentado distanciarse lo máximo posible de este escándalo, pero el futuro de Alexander podría escribirse fuera de la agencia que ahora controla. Y parece que él lo sabe a juzgar por sus declaraciones en las que justificaba que «todo es por la seguridad de Estados Unidos y los aliados».

En su visita a Washington, la delegación europea mostró su preocupación por unos programas de espionaje que «han ido demasiado lejos» y, sobre todo, por cómo se actúa dentro de la comunidad de inteligencia en EE UU, formada en un 70% por compañías de seguridad privada. «Alguien como Snowden no puede tener tanto acceso a información privilegiada», apuntaron las mismas fuentes. Al aluvión de revelaciones de los últimos días se sumó ayer una información de «The Washington Post», según la cual la NSA se infiltró en Yahoo y Google en todo el mundo para recopilar información de cientos de millones de cuentas de usuarios, recabando datos del emisor, destinatario y contenido de correos electrónicos. Alexander negó ayer esta información.

El Dato

Post «top secret»

«The Washington Post» reveló ayer, a través de los documentos de Snowden, cómo la NSA recolecta los datos privados de los usuarios de Google o Yahoo. Un post «top secret» explica la maniobra.