La Policía reprime las marchas contra Maduro

De nuevo narices rotas, brechas en la cabeza y sangre en las calles. Al menos cinco personas resultaron heridas ayer durante enfrentamientos entre manifestantes y los cuerpos de seguridad en la ciudad suroccidental de San Cristóbal, en el Estado de Táchira, al final de una marcha que realizaron varios miles de opositores para conmemorar el día de la juventud y las protestas de 2014 contra el Gobierno del presidente Nicolás Maduro. Decenas de manifestantes, algunos de ellos con los rostros cubiertos con telas, se enfrentaron con piedras, botellas y otros objetos contundentes a centenares de policías y guardias nacionales que lanzaron bolas de goma y gases lacrimógenos para contener la protesta.

Mientras tanto, en la zona norte de Caracas, varios cientos de jóvenes y opositores marcharon de forma pacífica entre banderas blancas y venezolanas y carteles en los que se leía «Venezuela no olvida a sus héroes». La marcha logró avanzar sólo dos calles debido a que fue bloqueada por varios centenares de policías y guardias nacionales, con equipos antimotines, que impidieron el avance de los manifestantes hacia una iglesia que era el punto final de la caminata. El acto opositor culminó con los sermones que ofrecieron dos sacerdotes, en medio de la calle y bajo una intensa lluvia, que recordaron a las personas fallecidas en las protestas de hace un año. También hubo manifestaciones chavistas.

A partir del 12 de febrero del 2014 y, durante cuatro meses, se registraron en Caracas y otras ciudades violentas manifestaciones callejeras contra Maduro que dejaron 43 personas fallecidas, 878 heridos y centenares de detenidos, entre ellos el líder opositor Leopoldo López, quien está recluido desde hace casi un año en una cárcel militar a las afueras de la Caracas.

Sin embargo, el 12-F también ha puesto de manifiesto la división que existe dentro de la oposición venezolana y de los grupos de estudiantes que marcharon en manifestaciones distintas a diferentes horas. La ex diputada venezolana María Corina Machado, el alcalde metropolitano de Caracas, Antonio Ledezma, y el dirigente opositor preso Leopoldo López propusieron «un acuerdo nacional para la transición».