Londres

Los presuntos asesinos del soldado Rygby querían exhibir su barbarie

Los musulmanes conversos Michael Adebolajo y Michael Adebowale quisieron exhibir "las consecuencias de su barbarie"tras asesinar de manera "cobarde y cruel"el pasado 22 de mayo al soldado británico Lee Rigby, aseguró hoy la Fiscalía.

En una vista celebrada en el tribunal penal Old Bailey de Londres, el fiscal Richard Whittam reconstruyó hoy un ataque que conmocionó al Reino Unido y suscitó una oleada de delitos antimusulmanes, como la quema de mezquitas, y una mayor actividad de la extrema derecha.

Adebolajo, de 28 años, y Adebowale, de 22, están acusados del asesinato del soldado, de 25 años, cuando volvía a su cuartel en el barrio de Woolwich tras trabajar en la Torre de Londres, de intentar matar a un policía esa misma jornada y de conspirar para acabar con la vida de otro, así como de posesión de armas de fuego.

Según recordó hoy el fiscal, Rigby fue embestido por el vehículo conducido por uno de los acusados y atacado después con un cuchillo y un machete, tras lo cual "arrastraron su cuerpo hasta el centro de la carretera"para que el público "pudiera ver las consecuencias"de su "barbarie".

"Cometieron un asesinato cobarde y cruel atacando deliberadamente por detrás a un hombre desarmado y de paisano, usando un vehículo como arma, y después le asesinaron y mutilaron su cuerpo con el machete y el cuchillo", relató Whittam.

El letrado también indicó que Adebolajo "casi logró decapitar"al soldado "con varios golpes de machete en el cuello", al tiempo que "Adebowale usaba un cuchillo para apuñalar y cortar el cuerpo de Lee Rigby".

Uno de los sospechosos, Adebolajo, fue grabado por viandantes con las manos ensangrentadas y empuñando un machete mientras justificaba el crimen por la matanza de musulmanes por parte de las tropas británicas en países como Afganistán e Irak.

En este sentido, el fiscal aseguró hoy que varios ciudadanos "demostraron tener valentía y decencia"a pesar del "horror"de la escena.

"Una mujer -dijo- fue hasta el cuerpo sin vida de Lee Rigby y le acarició para ofrecerle un poco de consuelo y humanidad. Otros se presentaron para ofrecer primeros auxilios. Otra mujer se puso a hablar con Michael Adebolajo a pesar de que todavía empuñaba el machete y tenía las manos ensangrentadas".

Los dos presuntos islamistas se quedaron en el lugar de los hechos hasta que llegó la policía, que disparó cuando los sospechosos, armados con una pistola, según el fiscal, intentaron abalanzarse.

Adebolajo resultó herido de gravedad y estuvo ingresado varios días en el hospital, donde ambos fueron formalmente arrestados.

Rigby -oriundo de Middleton, en Manchester (norte de Inglaterra)- era miembro del segundo batallón del Real regimiento de fusileros y había servido en Chipre, Alemania y Afganistán antes de ser destinado al cuartel de Woolwich para un puesto de reclutamiento y de asistencia en la Torre de Londres.