Maduro tilda de sabotaje el apagón que sufrió más de media Venezuela

De nuevo Venezuela a oscuras. Un fallo de gran magnitud en la línea principal de transmisión del sistema eléctrico nacional dejó varias horas sin luz a casi el 70% de Venezuela. El presidente Nicolás Maduro anunció ayer, sin mostrar pruebas, que fue producto de un «sabotaje». El mandatario, apodado por los antichavistas como «el nuevo príncipe de las tinieblas», expresó que el incidente afectó a Caracas y a 14 de los 23 Estados del país, pero dijo que el servicio se ha venido restableciendo progresivamente, con excepción de algunas regiones de la entidad petrolera de Zulia, donde aún persisten problemas de suministro.

«Estamos enfrentados a una guerra de baja intensidad que busca un alto impacto en la vida social y política... un desgaste prolongado de las fuerzas de la revolución para intentar en un momento dado un asalto final contra las fuerzas de esta revolución», afirmó el presidente al denunciar que sectores opuestos al Gobierno intentaron un «golpe eléctrico». Más temprano, Maduro señaló a través de su cuenta personal en la red social Twitter que ordenó a las Fuerzas Armadas activarse para «proteger todo el país».

Los venezolanos decidieron tomárselo con humor y colgar en las redes sociales una foto del «monstruo Godzilla» arrasando el tendido eléctrico, con un cartel que anuncia: «Ya sabemos quién está detrás de los apagones».

«A esta hora todo parece indicar que la extrema derecha ha retomado su plan de golpe eléctrico contra el país», indicó el mandatario venezolano en su cuenta de la red social. Asimismo, Maduro pidió a la población y a los trabajadores del sector eléctrico, controlado en su totalidad por el Gobierno desde hace seis años, ir a «una nueva etapa en la lucha por vacunar el sistema de sabotajes».

El líder opositor Henrique Capriles afirmó en Twitter que el apagón demostró la «terrible incapacidad» del Ejecutivo. En 2010, el país enfrentó una severa crisis eléctrica a consecuencia de una sequía que afectó la represa suroriental del Guri, donde se genera la mayor parte de la energía en Venezuela. La crisis dejó al descubierto problemas de mantenimiento que obligaron al Gobierno a realizar millonarias inversiones para recuperar el servicio. El entonces presidente Hugo Chávez, desesperado, llegó a ordenar bombardear las nubes para fomentar la lluvia.